Madrid, 19 jul (.).- Los inversores estarán pendientes esta semana de los datos adelantados de julio de la actividad económica y confianza de los consumidores en la Unión Europea (UE), Estados Unidos y Japón, aunque no perderán de vista la evolución de la epidemia de coronavirus y los posibles avances en el desarrollo de vacunas.
Además, en Europa, los mercados reaccionarán este lunes a los resultados de la cumbre de la UE, que se ha centrado en el futuro fondo de recuperación económica.
En EEUU, la atención estará puesta en la temporada de resultados empresariales del segundo trimestre, que ha arrancado esta semana con los grandes bancos.
En el ámbito macroeconómico, el martes se conocerá el índice de actividad de la Reserva Federal de Chicago y el miércoles, el índice de gestores de compras (PMI) adelantado del sector manufacturero en Japón.
El jueves se publicarán los datos de confianza de los consumidores en la zona del euro y el índice GfK de confianza de los consumidores en Alemania.
La semana se completa el viernes con los PMI provisionales de los sectores manufacturero y de servicios de la zona del euro y EEUU.
Según Hans-Jörg Naumer, de Allianz (DE:ALVG) Global Investors, "en conjunto se prevé que los datos presenten un panorama de una economía mundial en desescalada" aunque con un desarrollo "muy desigual" en los distintos países.
En su opinión, “no es de prever que se produzca una recuperación tan rápida y sostenible como anticipan las cotizaciones bursátiles".
"No pueden ignorarse las revisiones a la baja que aún se esperan de los beneficios empresariales", subraya.
José María Luna, director de Inversiones de Luna & Sevilla Asesores Financieros, destaca como factores clave a tener en cuenta esta semana la situación de la epidemia de coronavirus, los resultados empresariales del segundo trimestre, las tensiones geopolíticas y el resultado de la cumbre europea.
"La próxima semana deberemos seguir muy atentos a la evolución de la pandemia. Es quizás lo que más va a marcar el ritmo de los distintos activos financieros, no solo de las bolsas o de los mercados de crédito sino también de las divisas o de metales preciosos como el oro", explica.
"En segundo lugar, en el terreno micro, va a seguir la campaña de resultados empresariales. Veremos si, siendo malos, son menos malos de lo que descuenta el consenso. Esa es la clave. Quizás no sean tan buenos pero, si son mejores de lo que se está descontando, podrían animar a determinados sectores", añade.