Investing.com -- Los mercados del Reino Unido sufrieron un revés al dispararse los rendimientos de los bonos a sus niveles más altos en más de una década, debido a las persistentes preocupaciones sobre la inflación, evocando la crisis de los gilts de 2022. Los rendimientos de referencia a 10 años experimentaron un aumento de hasta 14 puntos básicos, alcanzando el 4,82%, un máximo no visto desde agosto de 2008.
La libra esterlina se depreció frente a todas las principales divisas, cediendo más del 1% frente al dólar, mientras que las acciones británicas también retrocedieron. Este comportamiento del mercado está llevando a los operadores a reconsiderar sus expectativas de que el Banco de Inglaterra reduzca las tasas de interés este año.
Estos movimientos se producen en un contexto en el que los mercados evalúan los posibles efectos sobre los precios de los aranceles propuestos por el próximo presidente estadounidense Donald Trump, lo que está provocando un aumento global de los rendimientos.
La actividad del mercado del miércoles, que careció de catalizadores evidentes, ha resultado particularmente desconcertante para los operadores. Esto se debe a que el aumento de las tasas en el Reino Unido está ocurriendo simultáneamente con una depreciación de la libra. Por lo general, unos rendimientos más altos aumentan el atractivo de una divisa, por lo que un descenso coordinado indica que los inversores están replanteándose el argumento general para invertir en el Reino Unido.
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