Se espera que los mercados de renta variable experimenten fluctuaciones y cambios impredecibles dentro de un rango de negociación más amplio en los próximos meses, según afirma Wells Fargo.
Desde que alcanzara su punto más bajo el 5 de agosto, el mercado de renta variable se ha recuperado significativamente, con un rápido retorno de la confianza de los inversores tras la publicación del informe de empleo de julio. Inicialmente, este informe había suscitado inquietud debido a que sus cifras eran significativamente inferiores a la media de las predicciones de los analistas.
El informe hizo temer una marcada desaceleración económica y conjeturar que la Reserva Federal (Fed) se retrasaba en la reducción de los tipos de interés. Sin embargo, los datos no fueron tan negativos como se pensó en un principio. Algunos analistas financieros sugirieron incluso una reducción inmediata y sustancial de los tipos de interés en 75 puntos básicos.
No obstante, los estrategas de Wells Fargo afirman que no había necesidad de una medida tan drástica y que las preocupaciones eran exageradas.
Mencionan que los datos más recientes han reforzado su perspectiva, mostrando que aunque la economía se está desacelerando, la probabilidad de entrar en recesión sigue siendo baja. Además, según datos de Bloomberg, las previsiones de beneficios de las empresas para la última parte de 2024 y para 2025 han mostrado un ligero aumento en los últimos tres meses. Estas perspectivas más positivas han provocado un mayor optimismo en los mercados, y tanto las acciones como los bonos han experimentado movimientos al alza.
Aun así, Wells Fargo aconseja a los inversores que mantengan la cautela en su optimismo, señalando que el índice S&P 500 (SPX) ha subido hasta un nivel sólo un 1,5% por debajo de su máximo de mediados de julio, que fue el más alto hasta la fecha. Aunque el índice tiene potencial para alcanzar su objetivo de 6.000 puntos a finales de 2025, actualmente su precio es superior a su objetivo de 5.400 puntos para finales de este año.
"En otras palabras, creemos que el mercado podría estar avanzando prematuramente, sobre todo si cotiza muy cerca del máximo histórico del SPX (5.667)", señalaron los estrategas.
Otra consideración es el rendimiento históricamente débil del mercado en septiembre, que, según el Stock Trader's Almanac, ha registrado la rentabilidad media más baja del SPX desde 1950. Aunque Wells Fargo no aconseja tomar decisiones de inversión basadas únicamente en estos patrones estacionales, sí prevé algunas fluctuaciones y cambios impredecibles en el mercado en los próximos meses.
Si el S&P 500 se acerca a su valor máximo, Wells Fargo recomienda reducir las inversiones en valores de mercados emergentes y en sectores como el de consumo discrecional, el de bienes de primera necesidad, el inmobiliario y el de servicios públicos, que evalúan como menos favorables.
"Aconsejamos reasignar estos fondos a los sectores que valoramos más favorablemente, incluyendo categorías de gran capitalización como Energía, Servicios de Comunicación, Financiero, Materiales e Industrial".
Los estrategas también sugieren ajustar las participaciones en valores nacionales de pequeña capitalización a un nivel neutral dentro de las carteras de inversión y considerar las caídas de precios hacia niveles mínimos recientes como oportunidades para comprar valores en sus sectores preferidos.
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