Roma, 6 may (.).- Los precios de los alimentos bajaron en abril gracias al descenso en el precio de los aceites vegetales y del maíz, aunque siguen siendo casi un 30 % superior respeto al mismo mes de 2021, informó hoy la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
En concreto, el índice de los precios de los alimentos de este organismo con sede en Roma se situó en abril en los 158,4 puntos, un 0,8 % menos que el mes anterior, cuando se registró un récord desde 1990.
La causa principal para esta leve bajada fue la disminución en los precios de los aceites vegetales, que se redujeron un 5,7 % respecto a marzo, gracias al racionamiento de la demanda, que hizo bajar los precios de los aceites de palma, girasol y soja.
"El pequeño descenso del índice es un alivio bienvenido, en particular para los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos, pero aun así los precios de los alimentos permanecen cerca de sus máximos recientes", explicó el economista jefe de la FAO, Máximo Torero Cullen.
Los altos precios, que perduran en una situación de inseguridad alimentaria mundial, reflejan la continua escasez del mercado y la incertidumbre en las exportaciones, como la que afecta a Indonesia, principal exportador mundial de aceite de palma.
Por su parte, el descenso del 3 % de los precios del maíz permitió una leve reducción en el precio mundial del cereal, aunque limitada por el continuo bloqueo del trigo en los puertos en Ucrania, uno de los principales productores de este cereal en el mundo, así como las malas cosechas en Estados Unidos.
A pesar de estas reducciones, el precio del arroz volvió a subir por la fuerte demanda de China, así como el precio del azúcar, que aumentó otro 3,2 % por culpa de las lentas cosechas de azúcar en Brasil, principal exportador de azúcar mundial.
El precio de la carne volvió a establecer un nuevo récord en abril, tras un aumento del 2,2 %, causado por los precios de la carne de aves de corral, que subieron por la interrupción de las exportaciones de Ucrania y el aumento de brotes de gripe aviar.
Los precios lácteos y de la mantequilla también subieron debido a la persistente escasez de la oferta mundial.