Madrid, 13 oct (.).- El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha apostado por llevar a cabo un "destope" tanto en la base máxima de cotización como en la pensión máxima, que actualmente se sitúa en el entorno de los 49.000 euros, un proceso que debería ser "gradual" y "negociado", además de "asumible" para las empresas.
Así lo ha indicado Álvarez este jueves durante un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, donde ha recordado que España tiene el tope más bajo de la Unión Europea, y ha puesto como ejemplo Francia, donde se sitúa en los 80.000 euros.
"En España tiene que haber un proceso gradual de destope, un proceso negociado y plenamente asumible para las empresas", ha dicho el líder sindical, quien ha reconocido no entender las críticas de la CEOE a la subida del 8,6 % de la base máxima de cotización, ya que "no obedece al destope, sino al incremento del coste de la vida".
Sobre este asunto, ha calificado de "moralina" que se hable de las pensiones más altas y que "no se diga nada de los sueldos absolutamente indecentes que tienen algunos altos directivos de empresas de nuestro país".
También ha rechazado la posibilidad de que se congelen esas pensiones más altas porque son las personas que más han contribuido al sistema y si en momentos de dificultad cargamos sobre ellas una parte de la crisis, lo que hacemos es decirles que "este sistema no les valora".
Álvarez ha considerado "indigno" que se plantee éste como "un problema intergeneracional", como si las personas mayores fueran responsables de "los salarios de miseria o de la penuria de los jóvenes en nuestro país".
Precisamente, en cuestión de salarios, ha remarcado que es "imprescindible" retomar la negociación y ha pedido a la CEOE que vuelva a la mesa con propuestas para poder llegar a un acuerdo y ha advertido de que de lo contrario habrá más conflictividad laboral, ya que "hay muchas personas con muchas dificultades".
SUBIDA "INSUFICIENTE" DEL IPREM
Preguntado por su valoración sobre los Presupuestos Generales del Estado para 2023, ha señalado que "responden al momento económico del país", pero ha considerado que la subida del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) es "insuficiente", ya que "desde su puesta en marcha ha tenido una pérdida de un 14,3 %" y "debería revisarse".
Según se desprende del proyecto de presupuestos, el próximo año se eleva a 600 euros el Iprem, un indicador utilizado para el acceso y cálculo de las prestaciones.
Álvarez ha defendido una reforma fiscal que contribuya al reparto de la riqueza y dé soporte a las personas que tengan menos y no se quede en "flor de unos presupuestos", porque lo que algunos llaman "cargas" para otros son derechos, son pensiones, salud y educación.
Y sobre la reforma laboral, ha insistido en que ha tenido efectos positivos sobre los trabajadores, la economía y las empresas, aunque "quedan cosas pendientes" y ha pedido al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, presente en el acto, que sean capaces entre todos "de ampliar ese consenso social tan amplio con un consenso político".