Madrid, 1 feb (.).- El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha asegurado de que no hay "un plan B" en caso de que el Congreso rechace la reforma laboral pactada por el Gobierno con los agentes sociales, y ha advertido de que ese escenario supondría "el peor golpe para las relaciones laborales y el diálogo social en democracia".
Álvarez ha reclamado a los grupos parlamentarios que convaliden un acuerdo que considera bueno porque "aborda problemas endémicos como la precariedad y la temporalidad y va a servir para aumentar el bienestar de la clase trabajadora", ha dicho en declaraciones a los medios tras reunirse con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños.
El ministro ha explicado a Álvarez el plan normativo del Gobierno para este año, después de habérselo presentado esta mañana al secretario general de CCOO, Unai Sordo, y ayer al presidente de CEOE, Antonio Garamendi.
El líder de UGT, que ha trasladado a Bolaños la importancia de que la reforma laboral salga adelante, ha considerado que el Congreso debería votar a favor con una mayoría amplia, porque votar en contra sería validar la continuidad de la reforma que el PP aprobó unilateralmente en 2012.
"Ningún partido va a poder explicar a sus electores que ha votado contra un acuerdo pactado entre los empresarios y los sindicatos que mejora la vida de las personas. Los partidos pueden proponer y aportar sobre los temas no negociados, pero la reforma debe aprobarse", ha añadido.