Fernando Labrador
Madrid, 22 feb (.).- El jefe para Europa de la tecnológica estadounidense Nutanix, Sammy Zoghlami, cree que "los rumores" de que su compañía pueda ser adquirida por algún gigante del sector son recurrentes y agradables, pero no ve "señales" de que se vayan a "atar" cuando "la independencia es un gran valor" para sus clientes.
"Hemos intentado mantener el espíritu de unicornio y la cultura de 'start-up'", explica Zoghlami en una entrevista con Efe en la sucursal de la multinacional en Madrid, al recordar que Nutanix fue la empresa del Nasdaq que más rápido llegó a facturar 1.000 millones de dólares -el listón para considerarla unicornio-, aunque sean ya una firma "madura".
El vicepresidente sénior para Europa, Oriente Medio y África (EMEA) de Nutanix, quien dirige desde París la actividad en 31 mercados, incluido el español, dice que las informaciones recientes sobre una posible compra por Cisco (NASDAQ:CSCO) los escuchó anteriormente de otras grandes tecnológicas como -enumera- Google (NASDAQ:GOOGL), Ricoh (T:7752) y HP (NYSE:HPQ).
Zoghlami dice que sobre todo se centran en crecer y piensan en el largo plazo, y que así "siempre habrá ofertas" por comprarles, mientras reflexiona que "no hay señal de vender ahora, cuando el impulso está alto", ya que si se atan a alguien, pierden valor "para el resto" de clientes.
"Esos rumores son una buena señal, demuestran el interés", presume Zoghlami al explicar que Nutanix atrae porque ha "construido un puente entre dos mundos que era difícil de crear".
Así, expone que Nutanix se fundó hace 11 años -él se unió hace 7-con la idea de ofrecer a otras empresas poder manejar "con un clic", en una única interfaz de software, todos sus datos e información digital, independientemente de en qué infraestructura se encuentren o de si tienen que ser combinadas varias.
De este modo, la digitalización de las empresas puede tener un mix de plataforma "hiperconvergente" que incluya nube pública y privada, con centros de datos, servidores "on-prem" (almacenes locales), nube híbrida y también "edge computing" (empleo del servidor o nube que esté más próximo a cada usuario, para optimizar tiempos y respuestas, como hará el 5G).
"Cuando el cliente hace su plan presupuestario no necesita saber dónde va a desplegar sus aplicaciones digitales en los próximos años y puede combinar o ir cambiando entre infraestructuras", indica Zoghlami.
El director de ingeniería de sistemas para EMEA de Nutanix, Sylvain Siou, argumenta a su lado que la principal ventaja para cualquier empresa en su transformación digital es poder considerar la infraestructura como un gasto fijo, "sin sorpresas ni vaivenes", por lo que Nutanix se ha centrado en ofrecer una suscripción anual.
En su último año fiscal -cerrado el pasado 31 de julio- Nutanix, que supera los 5.000 empleados, alcanzó el 71 % de la facturación vía suscripción y su objetivo es superar el 75 % en el próximo ejercicio.
"La transición hacia la suscripción está casi terminada", apunta Zoghlami, tras reconocer que "migrar a un modelo de suscripción es un ejercicio doloroso para cualquier compañía", pero apreciar que "una vez hecho puedes mirar a otros competidores" desde una perspectiva más avanzada, que rebasa la mera fidelización.
En ese sentido, admite que la migración a la suscripción ha lastrado la rentabilidad de Nutanix en los últimos trimestres, pero no el crecimiento del negocio, ya que la estrategia ha sido aumentar la cartera de clientes, que ya supera los 15.000, entre ellos Volkswagen (DE:VOWG_p), Hyundai, Europcar, Accor (PA:ACCP) Hotels, Jet Blue y Kinepolis.
Agrega que ese crecimiento "explosivo" es el reto básico especialmente en los mercados a los que la multinacional ha llegado más tarde, como al ibérico, donde cuenta con unos 150 clientes, unos 50 de ellos del sector público.
Están suscritas a Nutanix en Iberia empresas de diferentes sectores, como la malagueña de gestión de aguas Emasa; la entidad financiera andorrana Crèdit Andorrà, y el Grupo Godó, que edita el diario barcelonés La Vanguardia.
"No solo importa el crecimiento en número de empresas y en dólares, sino en cuántos clientes son 'transformacionales'", matiza Zoghlami, para referirse a las compañías que no solo apuestan por la transformación digital, sino también por un cambio en su organización de procesos y capacidades.
Zoghlami cree que dentro de unos años el sector de la computación en la nube tendrá "más competidores" que pasarán de la nube pública o la privada a convertirse en plataformas como ellos, así como esta década cree que seguirán surgiendo servicios nuevos que ofrecer a las empresas clientes.
A su juicio, si el obstáculo de los silos en los centros de datos llevó a que se crearan nuevas compañías como Nutanix hace una década, el próximo eslabón a salvar es de los silos entre nubes y "edge".