Portugal coloca el importe máximo de su emisión de deuda a interés más bajo

Lisboa, 6 jun (EFE).- Portugal colocó hoy 1.500 millones de euros en deuda a seis y doce meses, el montante máximo de su emisión, a cambio de tasas de interés menores que en la última ocasión, hace apenas un mes.

El Tesoro luso adjudicó 500 millones de euros en títulos a seis meses al 2,65 por ciento de interés, casi tres décimas menos que en mayo, cuando lo hizo al 2,93 por ciento.

También colocó otros mil millones de euros en letras a doce meses, por las que pagó un interés del 3,83 por ciento, lo que supone una ligera caída, respecto al último precedente, de siete centésimas.

El resultado de la subasta volvió a dejar señales positivas para el país, intervenido financieramente por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, y refleja que se mantiene alejado del foco de los mercados, cuya presión se dirige ahora a otros puntos de Europa, especialmente España e Italia.

De hecho, el 2,65 por ciento de interés registrado hoy en su subasta de deuda a seis meses es la menor tasa pagada por Portugal a este vencimiento desde septiembre de 2010, siete meses antes del rescate financiero, cuando la colocó al 2 por ciento.

La demanda, en ambos casos, superó hoy ampliamente la oferta, multiplicándola por 2,7 en el caso de los títulos a seis meses y por 4,3 en las letras a un año.

El Tesoro luso emite únicamente deuda a corto plazo desde que el país obtuvo, en mayo de 2011, 78.000 millones de euros de ayuda externa que cubren sus necesidades financieras a largo plazo.

Los intereses de esas subastas han bajado poco a poco a lo largo de este año.

Entre mediados y finales de 2011, los inversores exigieron a Portugal una rentabilidad cercana al 5 por ciento por comprar sus letras.

La credibilidad de Portugal se ha visto beneficiado por el apoyo de los técnicos de Bruselas y el Fondo Monetario Internacional que evalúan el cumplimiento del programa de ajustes y reformas pactado a cambio del rescate, y que el Gobierno luso ha ejecutado a rajatabla.

El último aval de la llamada troika llegó el lunes con el anuncio de las conclusiones de su cuarta inspección trimestral, que constata el cumplimiento por parte de Portugal de los pasos marcados para alcanzar sus objetivos de reducción del déficit y reformas estructurales.

La principal preocupación de las instituciones internacionales y del propio Ejecutivo luso es ahora el creciente aumento del desempleo, que ha subido más de lo esperado y llega ya al 15,2 por ciento.

Otro de los motivos de incertidumbre es saber si el país logrará volver a colocar deuda a largo plazo a intereses asequibles a partir del segundo semestre de 2013 como está previsto, una meta que analistas, expertos y agencias de calificación ponen en duda.

El Gobierno portugués, de signo conservador, mantiene oficialmente su confianza en lograr ese objetivo, aunque admite que, de no conseguirlo, necesitará el apoyo de la UE y el FMI, garantizado si aplica correctamente el programa de ajustes pactado.

"Hasta ahora hemos cumplido. Si alguna cosa externa no fuese bien, nuestros socios nos defenderían. Creen en nosotros y eso también es bueno", subrayó ayer el primer ministro luso, Pedro Passos Coelho. EFE