El sol no brilla igual para todos en Río de Janeiro. Cada amanecer, los niños de la favela "Ciudad de Dios" van a la escuela atenazados por un miedo que cala hasta los huesos. Atizada por la crisis económica, la violencia callejera se ha disparado en los últimos meses. Los tiroteos y refriegas constantes entre bandas criminales y las fuerzas del orden tienen a los vecinos con el corazón en un puño: