Roma, 15 nov (EFE).- Italia vivió hoy una jornada de manifestaciones en numerosas ciudades del país, entre ellas Roma y Milán, donde se registraron altercados y momentos de tensión, en contra de las últimas medidas económicas aprobadas por el Gobierno de Enrico Letta.
Con estas marchas, convocadas por los sindicatos de base CGIL, UIL y CISL, y a las que se sumaron los estudiantes, se buscaba evidenciar la oposición al proyecto de Ley de Presupuestos para 2014 aprobado por el Ejecutivo el pasado 15 de octubre y que se encuentra en tramitación parlamentaria.
Las protestas de este viernes cierran, además, cinco días de movilizaciones en toda Italia, que han incluido además huelgas en diferentes ámbitos del sector público con paros de cuatro horas, distribuidos de forma escalonada en las diferentes regiones del país.
Durante los actos de protesta de hoy, en algunas ciudades, como en el caso de Roma, se vivieron momentos de tensión cuando un grupo de jóvenes que marchaban por el centro de la capital y pertenecientes a una asociación de extrema derecha intentaron superar el cordón policial con el que las fuerzas del orden blindaron la zona.
Asimismo, según informaron los medios de comunicación italianos, en Milán otro grupo de varias decenas jóvenes se separó de la manifestación principal e irrumpió en las oficinas de Google, realizando pintadas en las paredes de la entrada del edificio, mientras que en otras ciudades como Turín algunos estudiantes lanzaron huevos contra la sede del Ministerio de Educación.
En Nápoles se registraron cargas policiales contra algunos estudiantes, que lanzaron botellas y piedras contra los agentes, quienes reaccionaron con botes de humo, según el testimonio de algunos de los participantes en la marcha.
Los sindicatos piden al Gobierno medidas destinadas a reducir los impuestos sobre los trabajadores y los jubilados, así como que se destinen recursos a revalorizar las pensiones y que se actúe para mejorar la eficiencia del gasto público.
"Hay que decir no a una Ley de Presupuestos que mira solo a la (reducción de la) deuda pública, mientras que existe una política que la hace aumentar (...) Nos estamos jugando el futuro del país", aseveró la secretaria general de la CGIL, Susanna Camusso, durante su intervención ante miles de manifestantes en Milán.
La secretaria de la CGIL se preguntó "¿Cómo es posible decir que Italia es un país moderno las empresas estratégicas cierran? ¿Cómo se puede decir que existen perspectivas si no damos un respiro a las retribuciones (salariales) y a las pensiones?", al tiempo que atacó al Gobierno Letta al que acusó de no cumplir con sus promesas.
Así, pidió que el primer ministro preste mayor atención a los trabajadores y los pensionistas y acabe con los "cuentos" como el de decir que "la crisis se ha acabado" y que en 2014 iniciará la recuperación económica, porque -agregó- "la recuperación existirá solo cuando los trabajadores no tendrán miedo a diario de perder su puesto de trabajo".
Mientras tanto, la Comisión Europea hoy se pronunció sobre el proyecto de Ley de Presupuestos aprobados por el Gobierno italiano y consideró que "evidencia progresos limitados" con respecto a las recomendaciones sobre las reformas estructurales realizadas durante el Consejo Europeo del pasado mayo.
Por ello, desde Bruselas se teme que Italia "no respete las reglas sobre el déficit que contiene el Pacto de Estabilidad", toda vez que señala que las medidas presentadas "no consentirán que Italia respete los objetivos" para la reducción de la deuda pública el próximo año.
Los Presupuestos para 2014 aprobados por el Gobierno italiano a mediados de octubre prevén intervenciones por valor de 11.600 millones de euros para el próximo año e incluyen recortes de cerca de 4.500 millones, entre otros puntos. EFE
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