Sao Paulo, 2 mar (EFE).- La petrolera estatal brasileña Petrobras anunció hoy la aprobación de su plan de desinversiones para el bienio 2015-2016, que tiene como objetivo reducir los activos no estratégicos para mejorar la contabilidad.
En un hecho relevante informado al mercado, Petrobras indicó que la Dirección Ejecutiva de la compañía revisó y aprobó el plan en una reunión realizada el último jueves.
El valor total del plan es de 13.700 millones de dólares, divididos entre las áreas de exploración y producción en Brasil y en el extranjero (30 %), abastecimiento (30 %) y de gas y energía (40 %).
"El volumen de desinversión aprobado representa un aumento en comparación con el monto del plan de negocios y gestión para los años 2014 y 2018, que era de 5.000 millones a 11.000 millones, conforme se comunicó en febrero de 2014", apuntó la compañía.
Este plan, agregó Petrobras, "forma parte de la planificación financiera de la compañía que tiene como objetivo reducir el apalancamiento, preservar el efectivo en caja y concentrarse en las inversiones prioritarias, sobre todo en la producción de crudo y gas en Brasil, en áreas de elevada productividad y rentabilidad".
No obstante, la petrolera aclaró que el valor aprobado es "sensible a variables de mercado", como la cotización del barril de petróleo tipo Brent, la tasa de cambio, el crecimiento económico brasileño y mundial, entre otras".
"Los cambios en estas variables podrían hacer que la compañía modifique su meta de desinversión" y cada operación de enajenación de activos "se someterá a la evaluación y aprobación de las requeridas instancias" de la propia empresa y al aval de los organismos reguladores en Brasil y el exterior, concluyó la nota.
Petrobras está sometida a una investigación policial y legislativa por un gigantesco escándalo de corrupción que vincula importantes constructoras, acusadas de pagar sobornos y sobrevalorar contratos, para beneficiar políticos.
La pérdida de credibilidad por la corrupción le ha causado a la empresa, la mayor de Brasil, grandes problemas para captar fondos en el exterior, por lo que se ha visto obligada a reducir al mínimo sus inversiones para los próximos años, y la ha llevado a perder el 58 % del valor de mercado entre octubre y enero.