Atenas, 12 jul (.).- La agencia de calificación de riesgos Moodys calcula que el producto interior bruto (PIB) de Grecia crecerá un 1,5 % este año y un 2 % en 2018, aunque advierte de que esta mejora de la economía puede verse comprometida por la alta deuda pública y la incertidumbre sobre la implementación de las reformas.
En un informe del que se hace eco hoy la prensa griega, Moodys dice que Grecia "necesita implementar efectivamente las medidas legisladas para poder mejorar la perspectiva de la economía a medio y largo plazo", y pone especial acento en la venta de activos públicos.
La calificadora con sede en Londres también advierte de la persistencia de la "debilidad" del sector bancario heleno, sobre todo por la alta exposición a créditos morosos.
No obstante afirma que las finanzas públicas son "más sólidas" que antes y que la conclusión de la segunda evaluación trajo la "tan necesaria liquidez" al país, al tiempo que "mejora la perspectiva para la llegada de inversiones".
Además Moodys considera que Grecia será capaz de alcanzar los superávits primarios (antes del pago de la deuda) acordados con los acreedores en el tercer rescate.
Sobre la deuda helena la agencia prevé que "la carga se estabilice" este año y empiece a descender en los años posteriores hasta alcanzar el 176 % del PIB en 2018, mientras califica de "positivo" un eventual acuerdo sobre un alivio de la deuda del país por parte de sus acreedores.