El presidente Donald Trump se dirigió recientemente a los líderes mundiales en Davos, donde esbozó sus planes para reducir los costes del petróleo y repatriar la fabricación a Estados Unidos. Manifestó su intención de solicitar a Arabia Saudí y a otros países de la OPEP que reduzcan los precios del petróleo, y reiteró su amenaza de utilizar aranceles para fomentar el regreso de la producción industrial a EE.UU.
Trump también expresó su deseo de una reducción inmediata de las tasas de interés, culpando a las altas tasas de las dificultades económicas durante el mandato de su predecesor, Joe Biden. Atribuyó estos problemas económicos a un gasto deficitario derrochador de 8 billones de dólares y a políticas energéticas restrictivas.
En su discurso, Trump afirmó que su segundo mandato se centraría en el uso de aranceles para impulsar la fabricación en EE.UU. Advirtió que los productos no fabricados en el país estarían sujetos a aranceles, lo que según él dirigiría miles de millones, y potencialmente billones, de dólares al Tesoro estadounidense.
El mandatario también elogió los compromisos de inversión en EE.UU. por parte de empresas, como los planes de SoftBank Group Corp. de construir infraestructura de inteligencia artificial y la promesa del príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed Bin Salman, de ampliar las inversiones y el comercio con EE.UU. en 600.000 millones de dólares. Trump aseguró que presionaría al príncipe heredero para aumentar esa cifra a 1 billón de dólares.
El presidente vaticinó que la bajada de los precios del petróleo podría reducir la inflación y permitir la reducción de las tasas de interés. También sugirió que esto podría presionar a Rusia para que ponga fin a la guerra en Ucrania.
Tras sus comentarios iniciales, Trump respondió a las preguntas del presidente del WEF, Borge Brende, y de un grupo selecto de ejecutivos, entre ellos Stephen Schwarzman de Blackstone Inc. y Brian Moynihan de Bank of America Corp.
En su actual mandato, Trump se ha comprometido a tomar medidas enérgicas contra la migración indocumentada y ha reiterado sus planes de imponer aranceles a México y Canadá. También indicó que los aranceles a China y la Unión Europea siguen siendo una opción.
Trump también ha tomado medidas para revertir las políticas de la era Biden sobre el cambio climático, al tiempo que impulsa la producción estadounidense de combustibles fósiles y repone las reservas de petróleo agotadas. Sus planes para aumentar la producción nacional de energía se producen en un momento en que la industria europea se enfrenta al aumento de los costes energéticos.
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