Jose Álvarez Díaz
Shanghái (China), 31 ene (EFE).- Casi una de cada tres firmas chinas que pusieron en marcha una oferta pública de valores (OPV) en las bolsas de Shanghái o Shenzhen durante 2012 ha acabado registrando menores ganancias que el año anterior, lo que podría hacer que Pekín endurezca aún más sus criterios para aprobarlas.
La Comisión Reguladora del Mercado de Valores de China (CRMV), que mantiene suspendidas temporalmente desde octubre las salidas a bolsa de nuevas OPV, no espera autorizarlas de nuevo, al menos, hasta junio próximo, mientras ya son cerca de 900 las firmas que están en espera de poder iniciar los trámites de solicitud.
Ahora se ha sabido que casi la tercera parte de sus predecesoras en 2012 empeoraron sus resultados tras la operación, según un estudio de la red local de datos bursátiles Hexin Flush Information Network.
Esto hace prever que, para muchas de las que están en espera, sus planes de salir a los mercados puedan verse todavía más dificultados, ya que la CRMV puede plantear exigencias más estrictas para la aprobación de nuevas OPV, según recoge hoy el diario "South China Morning Post".
La filial china de la auditoría PricewaterhouseCoopers publicó recientemente que calcula que en 2013 serán cerca de 200 empresas las que consigan llevar a cabo nuevas salidas a bolsa, más que las 124 que lo hicieron durante los primeros tres trimestres de 2012.
La red Hexin llegó a sus conclusiones tras recoger las previsiones de resultados anuales de esas 124 firmas, cerca de la tercera parte de las cuales prevé una caída de sus ganancias anuales en 2012, con un descenso de incluso más de un 50 % interanual en siete de los casos.
La CRMV mantiene paralizadas desde octubre las nuevas salidas a bolsa para tratar de recuperar la confianza de los inversores, tras el mal momento que vivieron las bolsas chinas en 2012, aunque desde diciembre la situación empezó a corregirse ante la expectativa de una recuperación de la economía en el país.
El organismo espera que mantener esta suspensión temporal de nuevas emisiones le ayude a evitar el riesgo de que la llegada masiva de nuevas acciones arrastre consigo a parte de las inversiones que ahora mismo están en otras firmas, lo que podría empeorar el rendimiento general de las bolsas chinas.
Durante 2012, la CRMV puso en marcha varias medidas para restringir el acceso al mercado de las firmas con peores resultados, y los datos que da ahora Hexin parecen indicar que el regulador podría continuar esta tendencia con criterios más estrictos para la aprobación de nuevas OPV cuando vuelva a autorizarlas.
Durante 2010 y 2011 llegó a producirse todo un aluvión de nuevas OPV, que infló de manera irreal los precios de salida al mercado y drenó buena parte de las inversiones en otras firmas para especular en las recién llegadas, lo que contribuyó a que el indicador de referencia del país, el índice general de Shanghái, se desplomara.
El indicador ha subido ahora un 21,6 % desde que alcanzó su peor cotización de los últimos cuatro años el pasado 4 de diciembre, pero hasta entonces llegó a perder un 21 % acumulado durante 2012.
Finalmente logró terminar el año con un 3,17 % positivo, después de haber caído un 21,68 % en 2011 y un 14 % en 2010, gracias al golpe de timón que dio durante el año pasado la nueva directiva del regulador, encabezada por Guo Shuqing.
La CRMV también instó a auditorías y corredoras a que lleven a cabo exámenes en profundidad de las cuentas de sus clientes que deseen salir a bolsa próximamente, y tengan listo un informe para entregar a las autoridades el próximo 31 de marzo.
La medida es observada como un claro mensaje a los banqueros de inversión chinos para que desistan de presentar las solicitudes que se vea que no tienen posibilidades de aprobar el cada vez más estricto examen de los reguladores.
Entreanto, Guo, que preside la CRMV, se encuentra en Taiwán, donde acordó con sus homólogos locales aumentar las cuotas máximas de inversión taiwanesa autorizada en los parqués chinos hasta 100.000 millones de yuanes (11.850 millones de euros, 16.071 millones de dólares). EFE