Ángel Gómez
Nueva York, 28 may (EFE).- Wall Street acabó hoy con números rojos, en una sesión con fuertes vaivenes que pudo terminar peor por la incertidumbre que aún persiste a causa del caso griego y por razones más locales que sembraron inquietud en el mercado.
El Dow Jones de Industriales, el principal indicador del mercado, terminó con un descenso del 0,20 %, hasta los 18.126,12 puntos, pero tuvo una sesión mala, tanto que estuvo a 66 enteros de terminar por debajo de la barrera psicológica de las 18.000 unidades.
Sólo después de media jornada pareció que apostaba por las compras, aunque con algunos tropiezos, y al final el mercado bursátil de Nueva York terminó con unas pérdidas que, aunque moderadas, dejaron mal sabor de boca.
A tono con los mercados europeos, la Bolsa de Nueva York se vio afectada por la incertidumbre que aún persiste en las negociaciones de Grecia con sus acreedores, en medio de mensajes en los que se habla abiertamente de que ese país puede terminar saliendo del euro.
Lo dijo la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, en declaraciones a un diario alemán, mientras el Gobierno de Atenas intenta cerrar con sus acreedores un programa que le permita superar la grave crisis de liquidez.
"Es muy improbable que en los próximos días alcancemos una solución comprensiva", dijo Lagarde, frente al optimismo que tenían altos funcionarios griegos el miércoles de que se cerrara pronto esa delicada negociación.
Wall Street también se vio inquieto por nuevas declaraciones de distintos representantes de la Reserva Federal (Fed) sobre movimientos futuros en relación con las tasas de interés de referencia, cercanas al 0 %.
El presidente del Banco de la Reserva Federal de San Francisco, John Williams, dijo que las autoridades estadounidenses muy probablemente subirán las tasas a fines de este año.
El presidente de la Fed en Minneapolis, Narayana Kocherlakota, señaló que las autoridades tienen que ser "extraordinariamente pacientes" a la hora de dictar nuevas medidas sobre un "acomodamiento monetario".
Por si fuera poco, el Departamento de Trabajo anunció que la cifra de solicitudes de subsidio de desempleo aumentó en 7.000 casos la semana pasada, su nivel más alto en cinco semanas.
Habrá que esperar a mañana para ver si Wall Street se repone de estos mensajes, fija un nuevo rumbo y, si lo hace, si recupera la tendencia que el miércoles, por ejemplo, le permitió conquistar un nuevo récord en el índice compuesto del mercado del Nasdaq.