Llanes (Asturias), 1 oct (.).- El consejero delegado de Volvo (ST:VOLVb) Car España, José María Galofré, asegura que mira con "optimismo" el mercado español del automóvil, aunque advierte de que la "esperada" recuperación de las ventas aún sigue "lejos".
En declaraciones a Efe con motivo de la presentación de la actualización del Volvo XC60, el modelo más vendido de su gama, Galofré ha explicado que, tras un primer cuatrimestre con restricciones por la pandemia, en junio y julio ha habido un repunte de la confianza del consumidor por un mayor ritmo de la vacunación.
Sin embargo, la falta de semiconductores para la fabricación de circuitos electrónicos hará que el año cierre con unas 900.000 unidades matriculadas, un 5 % más respecto al año pasado. Esa subida -ha precisado- es inferior al 12 % de alza que se estimaba al principio del ejercicio.
Aunque asegura que sigue viendo el mercado "con optimismo", ha matizado: "Seguimos lejos de la esperada recuperación, ya que el cierre de este año nos dejará en torno a un 30 % por debajo del mercado natural español, que se sitúa en unos 1.250.000 vehículos".
VOLVO CAR ESPAÑA CRECERÁ ESTE AÑO EN VENTAS Y EN CUOTA DE MERCADO
Sobre Volvo en España, asegura que las ventas están siendo "muy positivas" este año (9.706 unidades hasta septiembre, el 17 % más interanual) y está convencido de que esta buena tendencia continuará hasta el final del ejercicio.
"Cerraremos el año con un crecimiento de en torno a un 12 % de ventas (16.000 unidades) y un 'market share' del 1,75 %, lo que supone un crecimiento del 6 % respecto al año pasado, y del 33 % frente a 2019", ha indicado.
A nivel mundial, el objetivo de Volvo Car es conseguir un nuevo récord mundial de ventas y situarse cerca de las 800.000 unidades.
Según Galofré, a Volvo Cars la crisis de los semiconductores le está afectando en "menor medida" que a otras muchas marcas, como refleja el hecho de que en el primer semestre registró un récord de matriculaciones, con 380.757, un 41 % más que un año antes. El 25 % fueron de su gama Recharge (híbridos enchufables y eléctricos puros).
¿QUÉ PUEDE HACER LA AUTOMOCIÓN PARA REVERTIR LA FALTA DE CHIPS?
En su opinión, la creciente demanda de dispositivos que requieren de circuitos electrónicos (que está afectando a la automoción, entre otros muchos sectores) es "imparable y va a seguir aumentando", aunque los fabricantes habituales de chips están iniciando ya las inversiones hacia nuevas fábricas para abastecerla.
Actualmente, ha resaltado, los grandes fabricantes de chips prevén que a mediados de 2022 se empiece a estabilizar la oferta y la demanda. Entretanto, la industria del automóvil está revisando los procesos y la gestión de la producción "Just in Time (justo a tiempo)" para asegurarse que los semiconductores formen parte de la cadena de fabricación y evitar así posibles futuros problemas de aprovisionamiento.
OBJETIVOS MEDIOAMBIENTALES
Con el objetivo de velar por "la seguridad y el cuidado medioambiental", Volvo quiere reducir para 2025 su huella de carbono un 40 % en toda su cadena de valor (materias primas, fabricación, distribución, uso y reciclaje) y que para 2040 el efecto sobre el planeta sea completamente neutro.
Además, para 2025 quiere que el 50 % de sus matriculaciones sean de vehículos eléctricos y electrificados (híbridos e híbridos enchufables) y para el 2030 ofrecer únicamente eléctricos puros.
También trabaja con la cadena de suministros (donde ha llegado a un acuerdo con SSAB para conseguir producir un acero sin carbón y sin aumentar las emisiones) y con el área de distribución, buscando que los concesionarios reduzcan el uso de energía fósil y la sustituyan por otra de origen renovable, así como que cambien las ventas de vehículos térmicos por electrificados (en España ya suponen más de la mitad de las ventas, mientras que las de diésel puro únicamente el 3 %).