Nueva York, 29 feb (EFE).- Wall Street cerró hoy con pérdidas y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajó en 0,74 % a pesar de una subida del precio del petróleo en los mercados internacionales.
Ese índice perdió 123,47 puntos hasta las 16.516,50 unidades, el selectivo S&P 500 bajó un 0,81 % hasta los 1.932,22 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq se dejó un 0,71 % hasta las 4.557,95 unidades.
De esta forma, el S&P 500 y el Nasdaq terminaron febrero con pérdidas acumuladas del 0,43 % y el 1,22 % respectivamente, y suman ya tres meses seguidos de números rojos, algo que no ocurría desde 2011, mientras que el Dow Jones logró un leve ascenso del 0,27 %.
Los operadores en el parqué neoyorquino protagonizaron una sesión de gran volatilidad en la que se debatieron entre los avances y los retrocesos aunque en la última hora de contrataciones terminaron decantando la balanza por el lado de las ventas.
Los tres indicadores cerraron en negativo pese a que el petróleo repuntó en los mercados internacionales: el barril de Texas subió un 2,96 % y terminó en Nueva York en 33,75 dólares, y el crudo Brent avanzó en Londres un 2,47 % hasta 35,97 dólares.
Salvo materias primas (0,57 %), el resto de sectores en Wall Street terminaron en números rojos, entre los que destacaron el sanitario (-1,49 %), el financiero (-0,63 %), el tecnológico (-0,58 %), el industrial (-0,55 %) o el energético (-0,31 %).
El banco JPMorgan Chase (N:JPM) (-2,17 %) lideró las pérdidas en el Dow Jones, por delante de Exxon Mobil (N:XOM) (-1,94 %), Pfizer (N:PFE) (-1,85 %), UnitedHealth (N:UNH) (-1,84 %), Home Depot (N:HD) (-1,69 %), Nike (N:NKE) (-1,61 %), United Technologies (N:UTX) (-1,10 %), DuPont (N:DD) (-1,04 %) o Chevron (N:CVX) (-1,02 %).
Al otro lado de la tabla encabezó los avances el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar (N:CAT) (1,24 %) por delante de American Express (N:AXP) (0,36 %), Walt Disney (N:DIS) (0,22 %), McDonald's (0,11 %) y Boeing (N:BA) (0,02 %).
Al cierre de la sesión bursátil, el oro avanzaba a 1.239,5 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años retrocedía al 1,738 % y el dólar ganaba terreno frente al euro, que se cambiaba a 1,0878 dólares.