Lara Malvesí
Nueva York, 6 jun (EFE).- Wall Street digirió hoy sin problemas las palabras de la presidenta de la Reserva Federal (Fed), Janet Yellen, que restó importancia al último informe de empleo y vio "positivas" perspectivas para el futuro.
El Dow Jones de Industriales, el principal indicador, subió un 0,64 %, una tendencia que registró igualmente el Nasdaq y, especialmente, el selectivo S&P 500, que avanzó un 0,49 % y consiguió un nuevo máximo anual.
"Aunque la economía recientemente se ha visto afectada por una mezcla de fuerzas contrapuestas, veo buenas razones para esperar que las fuerzas positivas en apoyo del crecimiento en el empleo y la mayor inflación continuarán superando a las negativas", afirmó Yellen en un discurso en sobre política monetaria en Filadelfia.
Aunque el ideal de los operadores pasaría por posponer sine die nuevas subidas de tipos, a estas alturas de la película parecieron conformarse con que los planes de la Fed no sean por lo menos inmediatos, según concluyeron de las palabras de su presidenta.
Así, y aunque los operadores en el parqué neoyorquino ya habían apostado por las compras desde los primeros compases de la jornada en Wall Street, las ganancias aumentaron a partir de la media sesión después de una intervención pública de Yellen.
Según destacaba a la cadena financiera CNBC Robert Pavlik, jefe de estrategia de mercado de Boston Private Wealth, "el mercado se ha dado pronto cuenta que cuando (la Fed) habla de subidas no habla de la próxima semana".
Junio era hasta hoy una de las principales apuestas para la subida de tipos por parte de la Fed, aunque los analistas consideran tras escuchar a Yellen que la institución bancaria podría al menos posponer dicha decisión hasta la siguiente reunión mensual.
"Creo que julio todavía es una posibilidad. Junio ha quedado fuera de la mesa", apuntó John Caruso, analista de mercados de RJO Futures, por su parte.
Por otro lado, los inversores parecieron también celebrar el ascenso del petróleo en los mercados internacionales, donde el barril de Texas subió en Nueva York hasta 49,69 dólares, su nivel más alto desde julio pasado.