Laura Barros
Nueva York, 15 jun (.).- Wall Street terminó hoy en rojo aunque logró frenar el declive tras el temor que cundió en los mercados con el anuncio de que EE.UU. impondrá un arancel de 25 % a importaciones chinas con "tecnologías industrialmente significativas".
El Dow Jones de Industriales, el principal indicador de la bolsa de Nueva York, pasó de retroceder un 0,54 % en la apertura y de profundizar su descenso a un 0,85 % a mitad de la sesión, a cerrar sus operaciones con una baja del 0,34 %.
También afectados por la inquietud que generó el resurgimiento de las tensiones entre Washington y Pekín, el selectivo S&P 500 finalizó con una pérdida de 0,11 %, mucho menos que a lo largo de la jornada, y el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan los principales grupos tecnológicos, se desprendió de un 0,19 %.
La Administración de Donald Trump anunció hoy la imposición de aranceles del 25 % a importaciones chinas por valor de 50.000 millones de dólares, decisión que se conoció después de que en marzo pasado el mandatario anticipara sus planes en este sentido para contener el déficit comercial de Washington respecto a Pekín.
Pero el anuncio estadounidense fue respondido por China con la advertencia de que adoptará "las mismas medidas impositivas" y la cancelación de los acuerdos comerciales alcanzados por ambos gigantes, tal como lo había advertido ese país a comienzos de mes al concluir la tercera de negociaciones arancelarias y comerciales.
Desde mayo pasado, EE.UU. y China mantienen negociaciones para evitar una guerra comercial, a raíz de los aranceles anunciados por parte y parte.
Al referirse al comportamiento del parqué neoyorquino, Art Hogan, de la firma B. Riley FBR, señaló a la cadena CNBC que el mercado hoy decidió ahuyentar sus miedos silbando al "pasar el cementerio" y no descartó que entre los inversores haya primado el sentimiento de que puede darse una negociación.
Para la calificadora Moody's, este tema plantea "un desafío más amplio" para el comercio global, en un contexto de tensiones entre EE.UU. y sus socios comerciales.
Sobre las repercusiones, Moody's señaló que los aranceles de EE.UU. se restringen a un rango relativamente pequeño de productos de alta tecnología, cuyo impacto puede no ser significativo en la inflación estadounidense.
No obstante, advirtió que el impacto en el crecimiento y la inflación estadounidense dependerá de la respuesta china, que puede alcanzar sectores vulnerables que van desde la agricultura hasta la industria aeroespacial.