Nueva York, 3 ago (.).- Wall Street operaba hoy mixto a media sesión, cuando el único indicador que se encontraba en terreno positivo era el Dow Jones de Industriales, que registraba un leve progreso del 0,04 por ciento.
En el ecuador de la jornada, el Dow Jones, se había apuntado 9,07 puntos hasta los 22.025,31 enteros, por lo que se mantenía por encima de la marca de los 22.000 que el índice de referencia de Wall Street consiguió alcanzar ayer, a primera hora del día.
Sin embargo, el selectivo S&P 500 perdía un 0,21 % ó 5,18 puntos, hasta las 2.472,39 unidades, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan los principales grupos tecnológicos, también retrocedía un 0,21 % ó 13,04 puntos, hasta los 6.349,60 enteros.
Poco después del arranque de la jornada, los tres indicadores de Wall Street estaban en rojo, con el Dow Jones perdiendo un 0,07 por ciento, pero menos de una hora después consiguió cambiar al verde en una jornada en la que los inversores tratan de digerir los resultados empresariales del segundo trimestre del año.
La mayoría de los sectores estaban en terreno negativo a media sesión, encabezados por el energético, que caía un 0,59 %, seguido de cerca del de sanidad, que bajaba un 0,32 %.
Por el contrario, registraban subidas sólo dos sectores: el de bienes no cíclicos, que avanzaba un 0,68 %, y el de bienes cíclicos, que se apreciaba un 0,10 %.
De los treinta títulos incluidos en el Dow Jones de Industriales, las alzas estaban encabezadas por la farmacéutica Pfizer (NYSE:PFE) (+1,84 %), la aseguradora Travelers (NYSE:TRV) (+0,66 %), y Nike (NYSE:NKE) (+0,60 %).
El marcado avance de Pfizer se produce dos días después de que la empresa presentara unos buenos resultados empresariales del primer semestre de año, en el que revelaron que la compañía ganó un 22 % más que en el mismo período del año pasado.
Las caídas más pronunciadas dentro del Dow Jones eran las de DuPont (NYSE:DD) (-1,31 %), McDonald's (-1,05 %) y Apple (NASDAQ:AAPL) (-0,76 %).
Por su parte, el petróleo de Texas bajaba a 49,25 dólares el barril, el oro bajaba hasta 1.274,30 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años bajaba al 2,235 % y el dólar bajaba ante el euro, que se cambiaba a 1,1874 dólares.