Mateo Sancho Cardiel
Nueva York, 26 jun (EFE).- El Dow Jones de Industriales hizo hoy un esfuerzo por moderar las pérdidas de una semana dedicada casi íntegramente a seguir la crisis en Grecia y rompió la tendencia del Nasdaq y el selectivo S&P 500 subiendo más de 57 puntos a pesar de que el nuevo episodio de parálisis en las negociaciones en Europa.
Con todo, el Dow Jones no consiguió cerrar la semana por encima de los 18.000 puntos, cinco días que comenzaron con dos récords del mercado Nasdaq pero que luego empezaron a desinflarse ante las esperanzas cada vez más reducidas de que Grecia llegue a un acuerdo con Bruselas para prorrogar el segundo rescate.
Hoy Atenas dio la espalda a la solución de las instituciones (una prórroga de cinco meses) porque, argumentan, sería lo que se dice "pan para hoy y hambre para mañana".
La propuesta proponía a Grecia prorrogar el segundo rescate a cambio de recibir unos 15.500 millones de euros que le permitiesen hacer frente a sus obligaciones financieras con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE).
Así, el viernes se despidió con ganas de que el lunes puedan tener una apertura al alza si mañana sábado, cuando se celebra el quinto Eurogrupo extraordinario dedicado a Grecia en diez días, las dos partes lleguen a un acuerdo.
La negativa de Grecia, todo hay que decirlo, no tuvo una repercusión excesiva en Wall Street, donde el selectivo S&P cerró con pérdidas mínimas (casi en plano) y el Nasdaq se mantuvo en unos números rojos leves.
Dow Jones corrió más rápido gracias, curiosamente, a la firma de calzado y complemento deportivos Nike (NYSE:NKE), que hoy avanzó un 4,26 % un día después de sorprender a los mercados con sus resultados trimestrales.