Emilio López Romero
Nueva York, 11 abr (EFE).- Como el mejor de los vinos espumosos recién descorchado subieron hoy otra vez dos de los principales índices de Wall Street, donde empiezan a agotarse las existencias de champagne ante tanta celebración.
El Dow Jones de Industriales y el S&P 500 volvieron a dispararse este jueves tras cerrar la jornada con sendos avances del 0,42 % y el 0,35 % y dejar el listón en niveles nunca vistos, con dos nuevos récords históricos en 14.864,83 puntos y 1.593,37 enteros.
Los operadores siguen con ganas de fiesta y la excusa hoy fue la publicación de otro dato mejor de lo esperado sobre la evolución del mercado laboral en Estados Unidos, donde las peticiones del subsidio por desempleo bajaron hasta su nivel más bajo en tres semanas.
De esta forma sigue imparable el "rally" que ha permitido al Dow subir casi un 13 % desde enero y quedarse a menos de 200 puntos de su próximo techo, los 15.000, mientras el selectivo S&P 500 se ha apreciado casi un 12 % y está a menos de 7 puntos de los 1.600.
El buen ánimo en los mercados también se hizo patente en otras plazas financieras del mundo: Tokio cerró en su nivel más alto desde julio de 2008, y en el Viejo Continente Fráncfort lideró las subidas (0,85 %), por delante de París (0,58 %) o Londres (0,43 %).
La fiesta en el Dow podría haber sido mayor de no haber sido por el mal desempeño de sus valores tecnológicos: HP se desplomó el 6,45 %, Microsoft el 4,44 % e Intel el 1,95 %, tras publicarse que las ventas de PCs en el mundo se hundieron en el primer trimestre.
Ese descenso afectó a otras empresas del sector fuera de ese índice, como el productor de procesadores informáticos AMD (-3,45 %) o el fabricante de ordenadores Dell (-1,23 %), que afectaron al índice tecnológico Nasdaq y cerró con un mínimo avance del 0,09 %.
Mañana todas las miradas estarán puestas en dos de los grandes colosos de Wall Street, los bancos JPMorgan Chase y Wells Fargo, que hoy cerraron con tímidos ascensos a la espera de presentar sus resultados trimestrales.
En otros mercados, el petróleo de Texas bajó con fuerza el 1,19 % y cerró en 93,51 dólares por barril en un día en el que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) constató una apatía de la demanda de crudo. EFE