DUBÁI (Reuters) - Al Qaeda ha advertido a Arabia Saudí de que pagará por las ejecuciones de decenas de sus miembros, diciendo que estaban destinados a ser un regalo de año nuevo a los aliados occidentales de Riad encaminados a consolidar el imperio de la dinastía Saud.
Pese a que la muerte de un clérigo chií el 2 de enero provocó una crisis diplomática entre Irán y Arabia Saudí, la mayoría de los 47 ejecutados eran milicianos de Al Qaeda culpables de atentar contra el reino saudí.
En un comunicado del pasado 10 de enero, la rama de Al Qaeda en Yemen y en el Norte de África dijo que Riad llevó a cabo las ejecuciones pese a las advertencias en contra.
"Pero Riad insistió en ofrecer la sangre de los muyahidines como sacrificio para los cruzados en sus vacaciones, en Año Nuevo", dijeron los dos grupos islamistas en un comunicado en sus redes sociales.
"Dejémosles esperar por el día en el que Dios repare el pecho de las familias de los mártires, sus hermanos y todos los que les querían de lo que han hecho los arrogantes infieles", añadió el comunicado.
Anteriormente, la rama yemení de Al Qaeda amenazó en diciembre con "derramar la sangre de los soldados de Al Saud" si sus miembros eran ejecutados.
La pasada semana, Estado Islámico, un rival suní de Al Qaeda, también llamó a destruir las prisiones saudíes en las que se encuentran yihadistas.
Estado Islámico ha reivindicado una serie de ataques contra Arabia Saudí desde noviembre de 2014 cuando mataron a más de 50 personas, la mayoría chií en una mezquita.