TINDUF, Argelia (Reuters) - El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, visitó los campamentos de refugiados saharauis en el sur de Argelia el sábado como parte de los esfuerzos para reanudar las negociaciones para poner fin a la disputa entre el movimiento independentista Polisario y Marruecos sobre el territorio del Sahara Occidental.
El Frente Polisario, que dice que el territorio pertenece a la etnia saharaui, libró una guerra de guerrillas después de que Marruecos tomase la zona de la España colonial en 1975 hasta un alto el fuego mediado por la ONU en 1991. Las dos partes han estado estancadas desde entonces.
Muchos de los refugiados saharauis, que habían huido de los combates en el Sahara Occidental, han estado viviendo en casas de adobe en la dura zona de Tinduf hace unos 40 años.
Ban Ki-moon ha dicho que quiere relanzar las negociaciones sobre la región del desierto y permitir el regreso de los saharauis de los campamentos de refugiados en Argelia a través de la frontera. Argelia respaldó al Polisario en el conflicto contra su rival regional Marruecos.
"No voy a escatimar esfuerzos para ayudar a avanzar hacia una solución justa, duradera y mutuamente aceptable para el Sahara Occidental", dijo Ban, de acuerdo con la cuenta de medios de comunicación social de su portavoz.
El jefe de la ONU visitará los campos de refugiados y las escuelas en la zona de Tinduf y se reunirá con la dirección del Polisario allí.
Antes de la llegada de Ban, líder del Polisario Mohamed Abdelaziz dijo que la ONU había "perdido el norte" sobre el Sahara Occidental, pero calificó la visita de Ban como la mejor oportunidad en mucho tiempo para restablecer las negociaciones sobre un referéndum de autodeterminación.
El Frente Polisario, apoyado por Argelia y una serie de otros estados africanos, quiere celebrar desde hace tiempo un referéndum sobre el futuro de la región, prometido en el acuerdo de alto el fuego con la ONU.
"Queremos escuchar al Secretario General para lograr una solución de este año", dijo Abdelaziz.
Pero Marruecos quiere que el Sahara Occidental, que es rico en fosfatos y petróleo y gas en alta mar, sea una parte autónoma de Marruecos y no está de acuerdo con el Frente Polisario sobre quién debería participar en el referéndum.
El rey marroquí insistió a finales del año pasado que sólo el plan de autonomía es aceptable. Rabat invierte mucho allí, con la esperanza de calmar el malestar social y las reivindicaciones de independencia, y en febrero anunció un plan de inversión de 1.850 millones de dólares para la región.
Ban Ki-moon dijo que el enviado de la ONU el año pasado Christopher Ross había intensificado los esfuerzos para facilitar la entrada de las partes en negociaciones sin condiciones previas y de buena fe.
"Esperamos mucho de la visita del secretario general. Esperamos que ponga fin al sufrimiento de los saharauis y se resuelva el conflicto", declaró Ahmed lobulada, refugiado en uno de los campos, a Reuters. "Todos nosotros se niegan a continuar más como hasta ahora".