MAIDUGURI, Nigeria (Reuters) - Insurgentes islamistas nigerianos han tomado una base del ejército en la remota ciudad nororiental de Baga, dijeron dos fuentes del Ejército el domingo.
Baga es en teoría la sede de una fuerza multinacional que incluye tropas de Níger, Nigeria, Chad y Camerún, aunque en la práctica solo hay tropas nigerianas.
Los soldados huyeron de la base, situada en las orillas semidesérticas del lago Chad, después de ser objeto de un ataque el sábado por parte de combatientes de Boko Haram en vehículos militares, dijeron ambas fuentes. No fue posible obtener comentarios del ejército de manera inmediata.
Los rebeldes han matado a más de 10.000 personas el año pasado, de acuerdo con un recuento que hizo en noviembre el Consejo de Relaciones Internacionales.
Es la amenaza más grave para Nigeria, la mayor economía africana, y un dolor de cabeza para el presidente Goodluck Jonathan antes de unos comicios del 14 de febrero donde está siendo desafiado por el líder opositor Muhammadu Buhari, un ex gobernante militar considerado como duro en temas de seguridad.
Tras el comienzo de su lucha por un estado islámico hace cinco años en la ciudad nororiental de Maiduguri, los militantes se han expandido hacia áreas fronterizas porosas, amenazando a los vecinos de Nigeria en la cuenca del lago Chad.
En el norte de Camerún, al menos 15 personas murieron en un ataque que según se sospecha fue causado por militantes de Boko Haram contra un autobús, dijeron el sábado funcionarios.
El ejército de Camerún ha estado tratando de desplazar a los islamistas de su región del norte con la ayuda de ataques aéreos.
El ministro del interior nigeriano Hassoumi Massaoudou dijo el mes pasado que su país está listo para negociar con Boko Haram pero que no sabía con qué persona del grupo debería conversar.
Baga llegó a las primeras planas internacionales a inicios del 2013, cuando decenas de personas, principalmente civiles, murieron en combates entre la fuerza multinacional y Boko Haram. Muchos fueron quemados vivos en sus casas de paja.
Los extremistas también han secuestrado a cientos de personas, principalmente jóvenes, en el último año. El miércoles, hombres armados secuestraron a 40 niños y hombres jóvenes en la remota aldea de Malari, en una incursión que los residentes y una fuente de seguridad atribuyeron a Boko Haram.
Los padres de 200 niñas nigerianas secuestradas por Boko Haram en abril han dicho que pedirán ayuda a Naciones Unidas tras perder la fe en su propio gobierno.
(Información de Lanre Ola; traducido por Tomás Cobos en la Redacción de Madrid)