Por Anthony Boadle y Ricardo Brito
BRASILIA (Reuters) - El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, se unió a caballo a una manifestación el domingo, cuando sus partidarios instaron al cierre del Supremo Tribunal Federal por investigar al líder de derecha, mientras uno de sus jueces comparó los riesgos para la democracia de Brasil con la Alemania de Hitler.
Profundizando una crisis política durante uno de los peores brotes del nuevo coronavirus en el mundo, Bolsonaro ha criticado a la corte suprema por investigar su presunta interferencia en asuntos policiales y abrir una pesquisa sobre supuestas campañas de difamación e intimidación de sus partidarios en las redes sociales.
El capitán del ejército en retiro y defensor de la dictadura militar brasileña de 1964-1985 denunció las investigaciones, sugiriendo que no deberían seguirse "órdenes absurdas" y advirtiendo que la corte puede "sumir a Brasil en una crisis política".
Bolsonaro sobrevoló en un helicóptero militar la manifestación en Brasilia, donde las personas sostenían pancartas pidiendo el cierre del Congreso de Brasil y la máxima corte del país.
El juez del Supremo Tribunal Federal, Celso Mello, responsable por investigar las acusaciones del ex ministro de Justicia de que Bolsonaro intentó interferir en la fuerza policial por razones personales, dijo que los partidarios del presidente buscaban una dictadura militar.
"Es preciso resistir la destrucción del orden democrático, para evitar lo que ocurrió en la República de Weimar cuando Hitler, después de ser electo por el voto popular... no dudó en anular la constitución e imponer al país un sistema totalitario de poder en 1933", afirmó Mello a otros jueces en un mensaje visto por Reuters.
Una persona familiarizada con la materia confirmó la autenticidad del mensaje, que también fue reportado por periódicos brasileños.
Bolsonaro ha dicho que sus intenciones son democráticas y que sus oponentes pisotean la Constitución en sus esfuerzos por sacarlo del poder.
Tras su viaje en helicóptero, el mandatario caminó hacia la manifestación y estrechó la mano de seguidores, sin utilizar una mascarilla pese a que su uso es obligatorio en la capital para combatir el brote de coronavirus. Luego montó un caballo de la policía y pasó al trote en la multitud.
La noche del sábado, un grupo de partidarios de Bolsonaro con máscaras marchó hacia la corte con antorchas para pedir su cierre.
Durante manifestaciones del domingo en Sao Paulo, opositores al mandatario tomaron una avenida para protestar contra el "fascismo" y chocaron con la policía antidisturbios que intervino para evitar que se acercaran a un mitin en respaldo de Bolsonaro.
La policía utilizó gas lacrimógeno para dispersar a los jóvenes que lanzaban piedras.
(Información de Anthony Boadle, Ricardo Brito y Ueslei Marcelino en Brasilia, Reporte adicional de Leonardo Benassatto en Sao Paulo, Escrito por Anthony Boadle, Editado en Español por Manuel Farías)