Por Daniel Trotta y Nelson Acosta
LA HABANA (Reuters) - El Gobierno cubano otorgó a siete disidentes que están bajo libertad condicional un permiso por primera y única vez para viajar al extranjero, en un aparente gesto hacia Estados Unidos, previo a la visita que realizará el presidente Barack Obama.
A otros cuatro opositores que están bajo la misma condición no se les concedió el permiso por razones que no están claras hasta ahora, informaron disidentes.
"Celebramos la noticia (...) y seguimos alentando al Gobierno de Cuba para que permita que los otros cuatro ex prisioneros también viajen", dijo Peter Boogaard, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, en un comunicado.
Críticos en Estados Unidos a la apertura que ha tenido Obama con la isla, de gobierno comunista, se quejan de que ha recibido poco a cambio tras el restablecimiento en julio de las relaciones diplomáticas con su ex enemigo de la Guerra Fría. Para consolidar la mejora en las relaciones, el mandatario visitará Cuba el 21 y 22 de marzo.
Poco antes del anuncio de la normalización de relaciones en diciembre del 2014, el Gobierno de Cuba liberó a 53 personas a las que Washington consideraba como prisioneros políticos.
No obstante, algunas de ellas fueron arrestadas nuevamente después de su liberación y dos permanecen encarceladas, según el grupo disidente Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, dijo durante una audiencia ante el Congreso que Washington está decepcionado con La Habana por los nuevos arrestos, pero que espera que Cuba libere a los detenidos.
"Nosotros creemos que serán liberados (...) y eso significa que se está prestando atención, que hay movimientos" de parte del Gobierno cubano, dijo Kerry.
El Gobierno cubano sostiene que sus opositores son una pequeña minoría que ha perdido legitimidad mediante la aceptación de financiación indirecta de Washington.
Los siete disidentes que recibieron el beneficio fueron convocados por el Ministerio del Interior para comunicarles que podían viajar una sola vez y luego continuar con sus condenas en libertad condicional, que les impide desplazarse al extranjero.
"Parece que esta medida es algo como un regalo que quieren hacerle a Obama, pero en definitiva no es nada concreto pues cuando regresemos volveremos a estar en un limbo legal", dijo Martha Beatriz Roque, una de las que recibió el permiso.
Roque es la única mujer del conocido "Grupo de los 75" sentenciado en una redada del Gobierno contra la disidencia en marzo de 2003, llamada "Primavera Negra".
Con la mediación de la Iglesia Católica y el Gobierno de España, la mayor parte de ese grupo fue liberado con la condición de viajar a Madrid entre el 2010 y el 2011. Sólo 11 disidentes se negaron a abandonar la isla y cumplen sus sentencias de entre 18 y 25 años fuera de la cárcel.
"Es un pequeño regalito para los siete de cara a la visita de Obama. Los otros cuatro no tenemos ni siquiera ese obsequio del régimen porque siete se portan bien y los otros cuatro nos portamos muy mal", dijo José Daniel Ferrer, líder de la disidente Unión Patriótica de Cuba.
Funcionarios estadounidenses no estaban inmediatamente disponibles para comentar el tema, mientras que el Gobierno cubano no suele hacer declaraciones sobre asuntos relacionados con la justicia penal.