MADRID (Reuters) - Una pareja formada por un marroquí y una española presuntamente vinculados con el grupo extremista Estado Islámico ha sido detenida en Turquía, anunció el Ministerio del Interior español.
Los detenidos, que residían en Melilla, salieron del enclave español en el norte de África con su hija de 14 meses en octubre de 2014 para integrarse en DAESH, uno de los acrónimos de la organización integrista, dijo el ministerio.
"Sobre ambos pesaban órdenes internacionales de detención (...) al encontrarse evidencias de su integración en dicha organización terrorista", dijo el ministerio en una nota de prensa el viernes.
Desde su salida de España, las autoridades comenzaron el seguimiento de la pareja, que viajó a Siria y desde allí habrían entrado en Turquía, según las pesquisas, que tratan de determinar los motivos.
Los dos detenidos, Ahmed Debza y Nadia Ataich Fernández, viajaron desde Málaga a Estambul el 11 de octubre tras comprar los billetes con solo dos horas de antelación y pagar en efectivo, dos meses después de haber intentado entrar sin éxito en Siria.
En esa ocasión anterior, su objetivo quedó frustrado al coincidir con "una escalada de atentados" que hizo que los controles de seguridad fronterizos aumentaran considerablemente.
A este se suma otro intento, por parte únicamente de Debza, de entrar en territorio sirio el pasado julio, poco después de que el líder de la organización radical, Abu Bakr al Baghdadi, llamara a los musulmanes de todo el mundo a tomar las armas y a acudir al "califato" que declaró en tierras sirias e iraquíes capturadas.
SIN INTENCIÓN DE VOLVER
Antes de la última ocasión en la que la familia partió hacia Siria, Debza dejó un testamento para repartir sus bienes, "lo que indicaba la voluntad y previsión de no regresar", dijo el ministerio.
Tras desplazarse, los dos detenidos contactaron con varias personas "de su confianza" a las que ofrecieron ayuda para que siguieran sus pasos.
Mientras, en Melilla la versión que se había difundido era la de que Debza había regresado a su país de origen, Marruecos.
Las autoridades sostienen que los detenidos tienen "una sólida base ideológica de carácter extremista asentada en la defensa de la creación de un Califato", y aseguran que el "peligro potencial para la seguridad" se elevaría "exponencialmente en caso de que regresaran a España".
Ambos están a la espera de juicio por posibles delitos que pudiera apreciar Turquía y serán puestos a disposición de la Justicia española "lo antes posible".
La operación se llevó a cabo gracias a la colaboración de la Policía Nacional con el servicio de Inteligencia turco, el CNI y la Dirección General de la Vigilancia del Territorio de Marruecos.
La detención se produce días después de que las autoridades españolas desarticularan una célula yihadista en Cataluña que pretendía hacerse con explosivos para atentar contra una sinagoga o edificios públicos como el Parlamento.
Interior elevó el nivel de alerta terrorista a comienzos de año, poco después del atentado que tuvo lugar en París contra el semanario satírico Charlie Hebdo, de 2 a 3 en una escala de cinco niveles.