Por Marton Dunai
KECSKEMÉT, Hungría (Reuters) - La fiscalía húngara ordenó la detención durante un mes a tres ciudadanos búlgaros y un afgano sospechosos de haber transportado a 71 refugiados que fueron encontrados muertos en un camión de una carretera austriaca el jueves.
Las muertes provocaron una fuerte protesta internacional y mostraron los peligros que enfrentan centenares de miles de emigrantes que han elegido huir de la violencia y la pobreza de Oriente Medio y África y buscan la seguridad de la Unión Europea.
Los sospechosos, esposados y con una botella de agua cada uno, fueron escoltados por las fuerzas especiales de la policía al Tribunal central en la ciudad húngara de Kecskemét, donde el camión inició su viaje final.
Un portavoz de la fiscalía dijo a los periodistas que los cuatro encaran cargos de tráfico de seres humanos con tortura y con el fin de obtener beneficios económicos.
"El camión partió de Kecskemét, recogió a los emigrantes cerca de la frontera sur (con Serbia) y luego les trasladó desde Hungría a Austria", dijo a periodistas el portavoz de la fiscalía, Gabor Schmidt.
Los cuatro encaran cargos de prisión de dos a 16 años.
No son acusados de homicidio en Hungría porque enfrentarán ese cargo en Austria, indicó.
Los cuatro hombres llegaron al Tribunal en cuatro coches de policía distintos. Uno de ellos tenía casi 50 años y los tres más jóvenes, entre 20 y 30 años, salieron de los vehículos con un fuerte dispositivo judicial.
El Tribunal ha convenido la detención durante un mes, que podría prolongarse de manera indefinida.