Por Gwladys Fouche
SKIEN, Noruega (Reuters) - El asesino en masa Anders Behring Breivik dijo el miércoles ante un tribunal que Noruega intenta matarle sometiéndole a años de confinamiento en solitario, y se quejó de las degradantes condiciones carcelarias que sufre, como las comidas hechas en el microondas, que son "peores que el ahogamiento simulado".
Lo único que le ha mantenido vivo es su compromiso con el credo nazi, afirmó el hombre que asesinó a 77 personas en un atentado con bomba y un tiroteo en 2011, y que acusa ahora al Estado de violar sus derechos humanos. El Gobierno niega las acusaciones.
En un largo comunicado en la audiencia realizada en el gimnasio de la prisión, aseguró que encuentra "irritantes y ofensivos" los registros desnudo y que se siente aislado sin visitas. También se quejó del café frío y los cubiertos de plástico.
En el primer día de audiencia, se supo que tiene su propia cinta de correr, una PlayStation, una bicicleta fija y un sillón reclinable con reposapiés integrado. También que participó en el concurso navideño de cocina de pan de jengibre en la cárcel.
Los abogados del Gobierno dijeron también que recibía periódicos, revistas, libros, rompecabezas, veía DVD y escuchaba música con un Discman.
"Lo peor es el aislamiento (...) Estoy encerrado 23 horas al día", afirmó Breivik, respondiendo a preguntas de su abogado, Oeystein Storrvik, en el segundo día de procedimientos. "El Estado ha intentado matarme durante cinco años con este tratamiento (...) Habría sido mejor si me hubieran disparado, en lugar de tratarme peor que a un animal", agregó más tarde.
No repitió el saludo nazi que hizo al comienzo de la audiencia, que durará cuatro días, y que le valió una amonestación de la juez Helen Andenaes Sekulic.
Sin embargo, afirmó que es un seguidor del credo nazi desde que tenía 12 años. "Leí el 'Mein Kampf' (el libro de Adolf Hitler) cuando tenía 14 (...) Esos principios son la única razón por la que estoy vivo hoy".