Por John O'Donnell y Francesco Canepa
FRÁNCFORT (Reuters) - El Banco Central Europeo recortó el jueves sus proyecciones de inflación y crecimiento para la zona euro, y el presidente del organismo dijo que las perspectivas para la economía del bloque podría empeorar.
El BCE se comprometió a reforzar o prolongar su programa de alivio cuantitativo si las condiciones económicas se deterioran más, aunque ningún miembro del consejo de gobierno del banco central votó a favor de tomar nuevas medidas de inmediato.
El BCE, que dejó sus tipos de interés sin cambios en una decisión ampliamente esperada, dijo que las posibilidades de incumplir las metas de inflación a medio plazo se habían incrementado por la caída de los precios del petróleo, la desaceleración en China y en los mercados emergentes y la apreciación del euro.
Draghi sostuvo que el programa de compras de activos del banco de 1 billón de euros estaba surtiendo efecto, aunque lentamente, y que el consejo de gobierno del BCE estaba preparado y dispuesto a adoptar nuevas medidas de política monetaria, pero consideró que hacerlo ahora sería prematuro.
"En particular, (el consejo) recuerda que el programa de compra de activos proporciona flexibilidad suficiente a la hora de ajustar la magnitud, la composición y la duración del esquema", dijo Draghi en conferencia de prensa.
En un pequeño cambio al programa de alivio cuantitativo, el BCE acordó incrementar la proporción de cualquier otra emisión de bonos soberanos que podría comprar al 33 por ciento desde un 25 por ciento, siempre que no genere una situación en la que el Eurosistema tenga un poder minoritario de bloqueo.
El BCE prevé que la inflación será de apenas 0,1 por ciento este año, de 1,1 por ciento en 2016 y de 1,7 por ciento en el 2017, en comparación con las estimaciones de junio de 0,3 por ciento, un 1,5 por ciento y de 1,8 por ciento, respectivamente.
Además, redujo sus previsiones sobre el crecimiento económico del área del euro compuesta por 19 naciones a 1,4 por ciento en el 2015, 1,7 por ciento el año próximo y a 1,8 por ciento en el 2017, desde los cálculos de junio de 1,5 por ciento, 1,9 por ciento y 2,0 por ciento, respectivamente.
MÁS RIESGOS A LA BAJA
Los pronósticos fueron compilados basándose en datos registrados antes del 12 de agosto y no toman en cuenta el último deterioro económico detectado en China, que representan "riesgos a la baja" para las actuales estimaciones, dijo Draghi.
Sin embargo, dijo que el consejo tiende a considerar que el panorama de inflación más débil se presenta por "efectos transitorios", aunque observará de cerca todos los factores relevantes.
Draghi confirmó que el BCE había recortado la Asistencia de Liquidez de Emergencia (ELA) a los bancos griegos por segunda vez en dos semanas.
El BCE lanzó en marzo su programa de compras de activos por 60.000 millones de euros al mes para impulsar los precios del consumidor, después de caer brevemente en una deflación. La iniciativa estará vigente hasta septiembre del 2016 pero Draghi dio a entender claramente que podría ser prorrogada.
En su reunión de política monetaria, el BCE mantuvo su principal tasa de refinanciación, que determina el coste del crédito en la economía, en 0,05 por ciento. También dejó sin cambios el tipo para depósitos a un día en -0,20 por ciento, lo que implica que los bancos deben pagar por mantener fondos en el BCE. El tipo de préstamos marginales, o tipo de emergencia a un día para bancos, quedó en 0,30 por ciento.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) argumentó el jueves que el BCE debería considerar extender el alivio cuantitativo, tras citar los riesgos a la baja para la economía global debido a una combinación de factores, incluyendo la ralentización en China y el aumento de la volatilidad de los mercados.
Una mayoría de analistas encuestados por Reuters espera que el BCE finalmente extienda o incremente sus compras de activos. Tres tercios dijeron que el banco simplemente se ha quedado sin herramientas y que el ajuste del alivio cuantitativo, que estará en vigor hasta septiembre próximo, es la única opción viable.
"Incluso si parece ser demasiado pronto para esperar que anuncien un alivio cuantitativo adicional, el presidente del BCE, Mario Draghi, debería considerar una retórica más expansiva para evitar que las expectativas inflacionarias caigan más", dijo Credit Agricole (PARIS:CAGR) en una nota a clientes.
Peter Praet, economista jefe del BCE, ha dicho que los mercados no deberían dudar de la disposición y capacidad de actuar del banco. Pero los comentarios de otros funcionarios, como Benoit Coeure y Vitor Constancio, sugieren que la entidad quiere tomarse más tiempo antes de empezar a lanzar más medidas.