BAGDAD (Reuters) - Militantes de Estado Islámico avanzaban el miércoles por el oeste de Irak, conquistando otro pueblo cercano a Ramadi, capital de la provincia de Anbar, en un ataque al amanecer, dijeron fuentes policiales y funcionarios locales.
Cientos de familias huyeron de Albu Ghanim, unos 5 kilómetros al noreste de Ramadi, después de que las fuerzas de seguridad se retiraron tras ser atacadas durante la noche por los militantes en el lugar.
Abu Jasim, que abandonó Albu Ghanim poco después de su caída, dijo que los insurgentes establecieron un puesto de control en la entrada principal del pueblo y plantaron su bandera negra allí.
"EI nos detuvo y nos dijo que había venido para librarnos de los safávidas y negacionistas", dijo Abu Jasim, usando dos términos peyorativos con los que los musulmanes suníes de línea dura se refieren a sus rivales chiíes.
"Les dijimos que nos íbamos porque los niños están aterrados. Nos dejaron marchar y vimos cadáveres en las calles, algunos de policías y otros de civiles", afirmó.
Otro residente que huyó de Albu Ghanim dijo que los rebeldes declararon su victoria a través de los altavoces de la mezquita.
Los yihadistas han realizado varias incursiones en la periferia norte de Ramadi desde que el Gobierno anunció la semana pasada el comienzo de una nueva ofensiva para recapturar Anbar, un territorio simbólico para los suníes.
Dos batallones de la policía federal llegaron el miércoles a Ramadi para reforzar a las presionadas fuerzas locales, según un coronel y un policía.
El Gobierno iraquí perdió el control de vastas zonas de Anbar incluso antes de que EI capturara la ciudad norteña de Mosul en junio y proclamara un califato que comprende territorios de Irak y Siria.
Las fuerzas de seguridad y paramilitares chiíes han recuperado desde entonces algo de terreno en Irak, aunque EI sigue controlando importantes áreas suníes, como la provincia de Nínive, de la que es capital Mosul, y la mayor parte de Anbar.
La nueva campaña en Anbar buscaba reconquistar la ciudad de Tikrit, algo que lograron este mes las fuerzas de seguridad iraquíes y los paramilitares chiíes.
No obstante, los yihadistas contraatacaron en Anbar y Baiji, donde superaron un perímetro de seguridad alrededor de la mayor refinería de Irak días atrás.