BRUSELAS (Reuters) - El ministro de Economía griego, George Stathakis, dijo el sábado que los diputados disidentes del partido izquierdista Syriza, incluyendo ministros, deberían dar un paso a un lado si no están de acuerdo con las políticas del Gobierno sobre las reformas a aplicar para obtener un rescate.
El ministro también dijo que los controles de capitales impuestos sobre los bancos griegos continuarán durante al menos otros dos meses.
En un debate parlamentario que terminó a primera hora del sábado, 10 diputados de Syriza se abstuvieron o rechazaron una hoja de ruta de reformas que el Gobierno griego está negociando con sus acreedores internacionales, en un último intento de Grecia por evitar la bancarrota.
"Si algún legislador de un partido de izquierda no está de acuerdo con las políticas del gobierno (...) debería seguir las reglas y, si está fuertemente en desacuerdo, renunciar a su escaño", dijo Stathakis al canal de televisión griego Mega.
El ministro de Energía, Panagiotis Lafazanis, fue uno de los diputados de Syriza que no votó en favor de las medidas, que fueron aprobadas con el respaldo de partidos opositores partidarios de la Unión Europea.
"Si fuera yo, renunciaría", dijo Stathakis.
Asimismo, Stathakis afirmó que los bancos podrían reabrir ya la semana próxima si se logra un acuerdo con los acreedores este fin de semana, pero que otras restricciones sobre extracciones y exportaciones de moneda seguirían en vigor.
"Continuarán durante alrededor de dos meses", dijo.