Por Mariana Ionova
LONDRES (Reuters) - Alerta para los consumidores que cuidan su salud - una menor oferta ha impulsado al alza los precios mundiales del aceite de oliva hasta máximos de casi una década y el coste de aliñar una ensalada podría subir aun más debido a las perspectivas de otra escasa cosecha en España, que es el principal productor.
Los precios mayoristas para el aceite de oliva virgen alcanzaron los 4.099,52 euros por tonelada esta semana, una subida de más de un 60 por ciento respecto a un año antes, según la Fundación para la Promoción y el Desarrollo del Olivar.
Los precios al por menor han subido alrededor de un 10 por ciento en todo el mundo en los últimos 12 meses, mostró un análisis de Euromonitor.
"El principal motivo es un factor crucial en el suministro, que tuvo lugar simultáneamente en los dos países más importantes - España e Italia", dijo Vito Martielli, analista de Rabobank.
La sequía dañó el pasado verano la producción española, que fue de 835.000 toneladas, menos de la mitad que la temporada anterior con 1,78 millones de toneladas.
En Italia, que tradicionalmente ha sido el segundo productor mundial, una bacteria transmitida por insectos destruyó grandes áreas de olivares en el sureste del país y redujo su producción en más del 50 por ciento hasta las 222.000 toneladas.
La producción global para la campaña 2014/15 bajó un 29 por ciento, según cifras del Comité Oleícola Internacional (COI), lo que ayudó a colocar el precio al por mayor del denominado 'oro líquido' a su mayor nivel desde febrero de 2006.
El frenazo en la producción fue aliviado en parte por unas inusualmente grandes cosechas en Grecia y Túnez, así como por las vastas reservas de España procedentes de la campaña récord anterior.
Pero ahora esa reserva se agota. Se prevé que las reservas mundiales mengüen a unas 274.000 toneladas para el final de la actual campaña 2014/15, respecto a las 767.500 toneladas de hace un año, según estimaciones del COI.
Una nueva ola de calor este verano ha presionado más a la baja las cosechas en Europa y ha alimentado la preocupación ante una segunda mala cosecha en España, donde se produce alrededor del 45 por ciento del aceite de oliva del mundo.
Las previsiones son de una cosecha de entre 1,1 y 1,2 millones de toneladas, ligeramente menor a la media de los últimos cinco años de 1,25 millones. Los analistas dicen que el rendimiento podría ser incluso inferior si no llueve en España lo suficiente antes de que comience la recogida, a finales de octubre.
"El verano ha sido cálido y estas altas temperaturas no ayudan a los árboles, que están sometidos a presión", dijo Martielli.
Los precios al por menor para el aceite de oliva podrían subir entre un 15 y un 20 por ciento adicional los próximos meses, según David Turner, analista global de alimentación y bebidas en Mintel. Pero eso podría desatar una bajada del consumo y una corrección de precios.
"El mercado pasará dificultades si los precios siguen subiendo", dijo Turner. "Creo que los consumidores comenzarían a detener la cadena de valor. El aceite de oliva todavía es el más sano y sigue siendo el patrón oro, pero no es el único aceite", dijo.