BUDAPEST, (Reuters) - El novelista húngaro, superviviente al campo de concentración de Auschwitz y ganador del premio Nobel de Literatura en 2002, Imre Kertesz, murió el jueves a los 86 tras una larga enfermedad, dijo la agencia estatal MTI citando a su editor.
Kertesz ganó el premio Nobel por obras que según el jurado retrataban los campos de exterminio nazis como "la verdad definitiva" acerca de lo bajo que podrían caer los seres humanos.
Como judío perseguido por los nazis, y posteriormente escritor bajo el represivo régimen comunista húngaro, Kertesz soportó algunos de los mayores sufrimientos del siglo XX, de los cuales escribió con una directa y delicada prosa.
Ganó un millón de dólares al recibir el Premio Nobel por recoger "la experiencia del individuo que afronta en primera persona una historia brutal y arbitraria", dijo la Academia sueca cuando le otorgó su más alto galardón literario.
En su trabajo, Kertesz se refiere en repetidas ocasiones a su experiencia en Auschwitz, el campo de concentración de Polonia bajo ocupación alemana, donde murieron más de un millón de judíos y otras víctimas del Tercer Reich de Hitler.
"Es una de las pocas personas que consigue describirlo de una manera que inmediatamente nos hace imaginar todo a los que no hemos vivido esa experiencia", dijo en 2002 Horace Engdahl, secretario permanente de la Academia.
La primera novela de Kertesz, "Sin destino" - una historia en primera persona sobre la supervivencia de un niño en un campo de concentración - fue escrita entre 1960 y 1973, pero su publicación fue rechazada inicialmente por el régimen comunista de Hungría.
Finalmente se publicó en 1975, pero fue inicialmente ignorada por la mayoría del público. Kertesz escribió sobre esta situación en "Fiasco" (1988), en un libro que se consideró como el segundo volumen de una trilogía que cerraría su círculo con "Kaddish por el hijo no nacido". (1990).
Kertesz fue el primer húngaro en ganar el Premio Nobel de Literatura, aunque otros húngaros ya habían ganado el Nobel de Ciencias.
Tras ganar el premio, el escritor pasó la mayor parte de sus últimos años en Berlín, donde produjo sus últimos trabajos, y posteriormente regresó a Budapest. Sufría la enfermedad de Párkinson y rara vez salía de su casa de Budapest.