Por Alien Fernández
LA HABANA, 14 feb (Reuters) - Una empresaria cubana considera haber dado con una fórmula para elaborar un perfume único en la isla, inspirada en los afamados puros del país caribeño.
Clara Camalleri, una ingeniera de 53 años, espera algún día comercializarlo en el mundo. ¿Su ingrediente secreto?: La preciada hoja de tabaco cubano.
Es uno de los más importantes rubros exportables del país y se cosecha en gran parte de la mitad occidental de la isla caribeña, especialmente en la provincia de Pinar del Río, considerado el hogar del mejor tabaco del mundo.
Las hojas verdes del tabaco se trituran y sus jugos llenos de fragancias se mezclan con alcohol y otras esencias. Esta es la base del perfume, dijo Camalleri a Reuters en un pequeño laboratorio adjunto a su casa en La Habana.
"Le da un tacto y un olor especial, más completo", añadió sobre su producto, bautizado Vitola Cubana. "Y todo lo que hacemos es artesanal (...) y 100% ecológico (...) desde la producción hasta el embalaje".
Camalleri dijo que empezó a producir sus perfumes en 2018 pero formalizó el negocio luego de que el gobierno de Cuba levantara una prohibición a las empresas privadas que había estado vigente desde poco después de la revolución de Fidel Castro en 1959.
Los empresarios en la isla caribeña están luchando contra su peor crisis económica en décadas y enfrentan desafíos particulares, dijo Camalleri.
"(Hacer perfume) es complicado. No sólo en Cuba, en cualquier lugar. Aquí tenemos muchos más obstáculos", afirmó.
La obtención de materias primas, las importaciones e incluso los elementos básicos como la electricidad y el embalaje pueden ser un desafío, añadió.
Su equipo de trabajo incluye a sus padres y dos hijas que le ayudan a producir otros perfumes, geles antibacteriales y colonias de esencias derivadas de girasol, chocolate, café y canela.
"He utilizado mi arte (...) con los habanos. En Cuba hay escasez de perfumes (...) y por eso estamos tratando de satisfacer esa demanda", agregó.
(Reporte de Alien Fernández y Carlos Carrillo. Escrito por Nelson Acosta. Editado por Javier Leira)