Buenos Aires, 3 mar (EFE).- Los tribunales de Argentina
recibieron esta semana una seguidilla de reclamos judiciales que
buscan impedir el uso de reservas monetarias para el pago de deudas
soberanas, tal como lo dispuso el Gobierno.
Diputados de las opositoras Propuesta Republicana (PRO,
centroderecha) y Coalición Cívica (centro) pidieron hoy a la Corte
Suprema de Justicia que impida el uso de reservas monetarias para el
pago de deudas soberanas que vencen este año como ha dispuesto la
presidenta argentina, Cristina Fernández.
Los legisladores reclamaron que se mantenga vigente la suspensión
del uso de reservas monetarias que había dictado la Justicia
argentina en diciembre pasado.
La senadora del peronismo disidente Hilda Duhalde ya había
anunciado este martes que su sector recurrirá a la justicia para
impedir la medida.
"Es anticonstitucional lo que han hecho. (El Gobierno) ha actuado
como boquetero (ladrones) del Banco Central", sentenció la esposa
del ex presidente Eduardo Duhalde (2002-2003) al ser consultada por
los dos decretos presidenciales.
"Mientras la presidenta anunciaba el retiro de esas reservas,
estaban sacando ya esos recursos. Han llegado al extremo", se quejó
la senadora Duhalde.
En tanto, la opositora Unión Cívica Radical (UCR) también
solicitó este martes a la Justicia que impida al Gobierno utilizar
las divisas giradas por el Banco Central, al tiempo que tres
abogados presentaron sendos recursos judiciales contra la medida.
La presidenta argentina ordenó este lunes crear un Fondo del
Desendeudamiento Argentino, con 4.382 millones de dólares del Banco
Central, destinado a la cancelación de los servicios de deuda con
tenedores privados correspondientes a 2010.
La mandataria firmó además otro decreto, de carácter simple, por
el que el Tesoro afectó otros 2.187 millones de dólares que se
destinarán a cancelar pasivos con organismos multilaterales de
crédito.
Fernández firmó estos decretos luego de derogar otro, de
diciembre pasado, que ordenaba crear el denominado Fondo del
Bicentenario con 6.569 millones de dólares de reservas monetarias,
cuya aplicación fue frenada por fallos judiciales vigentes y cuya
validez se aprestaba a rechazar la oposición mayoritaria en el
Parlamento.
El Banco Central giró los 6.569 millones de dólares afectados por
los dos nuevos decretos el mismo día que la mandataria firmó los
dictámenes, lo que causó el rechazo de la oposición.
El jefe de Gabinete argentino, Aníbal Fernández, consideró hoy
que "el tema de las reservas es un tema terminado" e insistió en que
echar mano a los fondos del Banco Central permite al país ahorrarse
"1.000 millones de dólares de pago de intereses".
"El impacto que buscamos es que no haya nadie que diga que
Argentina no va a pagar. De esta manera, se deja en claro que va a
pagar todo el 2010. Ayer, el Riesgo País bajó y subieron cinco
puntos los bonos más volátiles y dos puntos los menos volátiles",
argumentó el jefe de Gabinete en declaraciones radiales.
La comisión de Finanzas de la Cámara de Diputados resolvió este
martes convocar al ministro de Economía, Amado Boudou, y a la
titular del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, para que den
explicaciones sobre la instrumentación de la medida.
"No tenemos elementos todavía, pero si de la exposición surge
algo, haremos las denuncias que sean necesarias", sostuvo el
diputado de la opositora Coalición Cívica Alfonso Prat Gay, titular
de la comisión, dominada por fuerzas contrarias al Gobierno.
Por su parte, Marcó del Pont afirmó hoy que si la citación
parlamentaria "se ajusta a lo que plantea la Carta Orgánica del
Banco Central", que establece que la Comisión de Presupuesto y
Hacienda también debe participar de la reunión, "con gusto" irá "a
informar todo lo que sea necesario".EFE