Por Nandita Bose
WASHINGTON, 6 jun (Reuters) - El gobierno de Estados Unidos prometió el martes un mayor esfuerzo para combatir las sobredosis de drogas que causaron unos 100.000 muertos en el país el año pasado, aprovechando una cumbre en la Casa Blanca para promover un enfoque multifacético contra las drogas sintéticas e ilícitas como el fentanilo.
"La cumbre de hoy es necesaria porque el entorno mundial y regional de las drogas ha cambiado radicalmente con respecto a hace tan solo unos años", declaró Rahul Gupta, director de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca, en el encuentro, celebrado conjuntamente con responsables de salud pública de México y Canadá.
Funcionarios del Gobierno del presidente Joe Biden señalaron que utilizarán herramientas como medicamentos para revertir las sobredosis de opioides y emplearán la recopilación de datos para guiar sus esfuerzos.
"Hoy estamos aquí para (...) ver cómo se puede mejorar nuestra respuesta colectiva y el papel que tiene la recopilación de datos para salvar vidas", agregó Gupta.
Más de 109.000 estadounidenses murieron el año pasado por sobredosis. Dos tercios de los decesos estaban relacionados con drogas sintéticas como el potente opioide fentanilo, según los datos compartidos durante la reunión.
Cada año muere un número sin precedentes de personas por sobredosis e intoxicaciones en Estados Unidos, México y Canadá, según Gupta.
El Secretario de Salud y Servicios Humanos estadounidense, Xavier Becerra, afirmó que es fundamental un enfoque regional para hacer frente a la crisis de sobredosis y adicción.
El mes pasado, la administración de Biden dijo que estaba intentando reunirse con los fabricantes de la naloxona, un medicamento que salva vidas y se utiliza para revertir las sobredosis de opiáceos, en un esfuerzo por aumentar el acceso y reducir el coste.
El abuso de opiáceos ha asolado a Estado Unidos durante más de dos décadas y ha matado a más de medio millón de personas, según datos federales, convirtiendo los analgésicos altamente adictivos en una crisis de salud pública.
En abril, la Casa Blanca declaró que Estados Unidos planeaba ampliar sus esfuerzos para desbaratar las actividades financieras ilícitas de los narcotraficantes implicados en el comercio de fentanilo mediante el aumento del uso de sanciones.
Algunos congresistas han pedido al gobierno de Biden que adopte una línea más dura y aumente la presión sobre México para que tome medidas enérgicas contra el tráfico de fentanilo.
Varios legisladores republicanos han solicitado que el Ejército estadounidense bombardee a los cárteles mexicanos y sus laboratorios dentro de la nación lationamericana, una propuesta que el gobierno de Biden no ha aceptado.
(Reporte de Nandita Bose en Washington; Editado en español por Raúl Cortés Fernández)