MADRID (Reuters) - La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) presentó el jueves un informe crítico con las restricciones vigentes en España para el alquiler de vehículos con conductor (VTC), argumentando que reducen la competencia e impiden un abaratamiento de los precios en este negocio.
La CNMC advirtió que estas restricciones tienen un impacto económico para la sociedad de al menos 324 millones de euros al año.
En el mercado del alojamiento urbano o del transporte de pasajeros nuevas empresas como Airbnb o Uber están desafiando a los sectores tradicionales de hostelería o taxi, pero en muchas ciudades las empresas emergentes están tropezando con serias restricciones para desarrollar su modelo de negocio.
La normativa actual en España para el transporte urbano de pasajeros, aprobada en 2015, establece para los VTC la obligación de ofrecer sus servicios solo en la modalidad de precontrato, prohibiéndoles permanecer estacionados o circular por las calles en busca de clientes.
La CNMV, que ha interpuesto un recurso administrativo contra estas restricciones, dijo que solo sirven para blindar el monopolio de los taxis en el transporte urbano de pasajeros.
"Todas estas restricciones reducen el bienestar general y carecen de justificación en los principios de regulación económica eficiente", dijo la CNMC.
El regulador criticó también "la existencia de férreos límites cuantitativos" en el sector de taxis, que han impedido su desarrollo normal en los últimos años y han mantenido prácticamente constante el número de licencias de taxis entre 1998 (70.373) y 2015 (70.509).
La CNMC ya libró recientemente una batalla contra las "restricciones artificiales" en la regulación de los apartamentos turísticos en diversas regionales, que obtuvo una victoria parcial al tumbar un tribunal madrileño esta semana un decreto que impedía contratar una vivienda turística por un periodo inferior a los cinco días.
La Comisión Europea también ha tomado cartas en esta asunto y anunció la semana pasada que procuraría que las legislaciones nacionales no violen los tratados de la UE e impongan medidas excesivamente restrictivas sobre la economía colaborativa.
Por su parte, el sector del taxi señala que Uber es una multinacional "que no tiene nada de colaborativa", que "genera precariedad" y "arruina a miles de autónomos", en palabras de según la Federación Española del Taxi.
"... la organización representativa de los taxistas españoles lamenta que (la Comisión Europea) se oriente únicamente hacia la exigencia de responsabilidades a los ciudadanos que usen dichas plataformas digitales en vez de obligar a las mismas a cumplir las reglas de competencia, fiscales y sociales de los Estados miembro", dijo la asociación a principios de este mes.