MOSCÚ (Reuters) - Una flota de buques de guerra de Rusia entró en el Canal de la Mancha el viernes y la prensa de ese país aseguró que las naves estaban allí para realizar ejercicios militares, lo que fue descartado por un responsable de la OTAN.
La agencia rusa de prensa RIA citó a la Flota del Norte afirmando que sus embarcaciones, encabezados por el buque antisubmarinos Severomorsk, había atravesado el Estrecho de Dover y que ahora estaba en aguas internacionales en la Bahía del Sena esperando que pasara una tormenta.
"Mientras están anclados, la tripulación está realizando una serie de ejercicios sobre cómo hacer frente a fuerzas submarinas infiltradas y están entrenando con técnicas de supervivencia en caso de inundación o de incendio", dijo la Flota del Norte en un comunicado, según la citó RIA.
No fue posible comunicarse con la Armada rusa para que emitiera declaraciones y el Ministerio de Defensa no quiso referirse a la información.
La Armada francesa confirmó la ubicación de las naves y dijo que no es inusual que haya barcos rusos en el Canal.
"No están haciendo ejercicios. Sólo están esperando en una zona donde pueden estar varias veces al año", dijo el servicio de información de la Armada de Francia.
El teniente coronel Jay Janzen, portavoz militar de la OTAN, dijo además que la alianza tenía conocimiento de la ubicación de los buques rusos.
"Nuestra información indica que los barcos están transitando y que se han retrasado por las condiciones del tiempo. No están haciendo ejercicios en el Canal, como algunos titulares rusos nos habrían hecho creer", dijo Janzen.
Recientemente, Rusia ha hecho alarde de su poderío militar, y la OTAN ha informado de más incursiones de naves de combate y bombarderos de largo alcance.
Las maniobras de Rusia se producen tras meses de tensiones por Ucrania, donde Moscú se anexionó la península de Crimea y apoya a los separatistas armados que se oponen al Gobierno en Kiev.
(Información de Vladimir Soldatkin en Moscú, Gregory Blachier en París y Adrian Croft en Bruselas. Traducido por la Mesa de Santiago de Chile; Edición de Emma Pinedo)