Por Belén Carreño
MADRID, 4 abr (Reuters) -La Guardia Civil española incautó el lunes un superyate perteneciente al oligarca ruso Viktor Vekselberg, a petición de las autoridades estadounidenses, en la primera vez que Estados Unidos se incauta de propiedades pertenecientes a un oligarca ruso desde su invasión de Ucrania en febrero.
Valorado en más de 90 millones de euros (99 millones de dólares), el "Tango", de 78 metros de eslora, fue incautado en un astillero de la isla mediterránea de Mallorca, según informaron la Guardia Civil y el Detpartamento de Justicia de EEUU en comunicados separados.
Se incautaron varios documentos y dispositivos informáticos a bordo, informó el cuerpo armado español, añadiendo que para realizar la incautación se ha seguido "una compleja trama financiera y societaria para ocultar la verdadera titularidad real" del buque.
El Departamento de Justicia de EEUU dijo el lunes que el "Tango" está sujeto a confiscación en base a violaciones de los estatutos estadounidenses de fraude bancario, lavado de dinero y sanciones.
Por otra parte, la Fiscalía de EEUU también presentó órdenes de incautación en un Tribunal de Distrito del país, en relación con aproximadamente 625.000 dólares depositados en nueve instituciones financieras estadounidenses asociadas con las partes sancionadas.
Un portavoz del multimillonario Vekselberg, que dirige el conglomerado de aluminio y energía Renova, no hizo comentarios de forma inmediata.
Vekselberg no figura en la lista de personas sujetas a sanciones de la Unión Europea contra Rusia.
Sin embargo, fue sometido a sanciones estadounidenses por la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2016, y posteriormente fue incluido en una lista de miembros del círculo íntimo del presidente Vladimir Putin a los que se apunta como represalia por la invasión rusa de Ucrania.
Según la orden de incautación de EEUU, Vekselberg está acusado de conspirar con otros para cometer fraude bancario "estructurando las transacciones sobre el 'Tango' de tal manera que se oculte la participación de Vekselberg en la propiedad" del buque, engañando así a los bancos estadounidenses para que procesen las transacciones.
La orden judicial también cita un litigio anterior contra los fundadores de Renova, incluido Vekselberg, que se remonta a 2001, en el que se lo acusaba de participar en una "trama generalizada de chantaje y blanqueo de dinero".
La acción del lunes marca el primero de los muchos casos previstos por el grupo de trabajo "KleptoCapture" del Departamento de Justicia de EEUU.
Lanzado el mes pasado, su objetivo es poner en apuros las finanzas de los oligarcas rusos en un intento de presionar al presidente ruso Vladimir Putin para que cese su guerra contra Ucrania.
El nombre de la unidad es un juego de palabras con la palabra "cleptocracia", en referencia a los mandatarios corruptos que abusan de su poder para acumular riqueza. El grupo de trabajo incluye a fiscales, investigadores y analistas de múltiples agencias federales.
"Hoy es la primera vez que nuestro grupo de trabajo se incauta de un activo perteneciente a una persona sancionada con estrechos vínculos con el régimen ruso. No será la última", dijo el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, en un comunicado por vídeo.
"Junto con nuestros socios internacionales, haremos todo lo posible para responsabilizar a cualquier individuo cuyos actos criminales permitan al Gobierno ruso continuar su injusta guerra".
Incluso si un buque sancionado se encuentra fuera de Estados Unidos, realizar pagos de mantenimiento o de seguro del buque utilizando dólares estadounidenses podría hacer que la embarcación sea objeto de confiscación civil o penal por parte de Estados Unidos, según Andrew Adams, el jefe del grupo de trabajo.
"Las leyes de confiscación tienen realmente cierto peso en ese sentido", dijo Adams a Reuters en una entrevista la semana pasada.
La Guardia Civil dijo que actuó en una operación conjunta en la que participaron el propio cuerpo armado español, la Agencia Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) estadounidenses.
Las autoridades españolas han incautado en las últimas semanas otros tres superyates sospechosos de pertenecer a ciudadanos rusos en virtud de las sanciones de la UE.
(1 dólar = 0,9085 euros)
(Información de Belén Carreño, Inti Landauro y Aislinn Laing desde Madrid, de Sarah N. Lynch desde Washington, y de Luc Cohen y Jonathan Stempel desde Nueva York; editado por Andrei Khalip, John Stonestreet y Grant McCool; traducción de Darío Fernández)