MADRID (Reuters) - Con un número sin precedentes de jugadores internacionales españoles en equipos de la Premier League, el entrenador se apoyará más que nunca en jugadores de otras ligas para el partido clasificatorio de la Eurocopa 2016 ante Eslovaquia de este sábado.
Pedro se convirtió en el último en cruzar el Canal de la Mancha al fichar el mes pasado por el Chelsea procedente del Barcelona el mes pasado, uniéndose de esta forma al delantero Diego Costa, los centrocampistas Cesc Fábregas, David Silva, Juan Mata y Santi Cazorla, el defensa César Azpilicueta y el portero David De Gea en la liga más rica del mundo.
De ellos, parece que sólo Costa y Silva jugarán desde el comienzo el partido en Oviedo.
Con una victoria, España podría igualar a 18 puntos con Eslovaquia en el grupo C tras siete encuentros. El equipo eslovaco empezó a liderar el grupo tras la sorprendente victoria de 2-1 sobre España en octubre.
Del Bosque podría optar por sacar del banquillo a Pedro, Fabregas o Mata en caso de que las circunstancias del partido lo requieran debido a que todos ellos cuentan con capacidad para romper las sólidas defensas a las que se suele enfrentar el campeón del mundo de 2010.
España ha tenido hasta ahora una poco convincente actuación en los clasificatorios para el torneo del año que viene en Francia, en el que perseguirá su tercer título europeo consecutivo después de los conseguidos en 2008 y 2012.
Aún parecen estar recuperándose de la lamentable defensa que hicieron de la Copa del Mundo en el Mundial en Brasil el año pasado, después de la que incondicionales y pesos pesados como Xavi y Xabi Alonso se despidieran de la selección.
"Lo que ocurrió en Brasil sigue siendo una espina clavada para aquellos que estuvimos allí", dijo el miércoles Mata en una rueda de prensa.
"Está generación tiene la capacidad de lograr cosas", añadió el centrocampista del Manchester United.
"Podemos hacer las cosas muy bien y queremos continuar el buen ritmo de la selección a nivel europeo".
Eslovaquia no podrá contar con algunos jugadores por lesión o suspensión, incluyendo al defensa y capitán, Martin Skrtel, que no está disponible tras recibir una tarjeta amarilla en la victoria por 2-1 de junio contra Macedonia.
España no ha sido derrotado en casa durante los clasificatorios para un gran torneo en 30 partidos que abarcan más de una década, siendo el último una derrota ante Grecia en junio de 2003.
No obstante, el seleccionador Jan Kozak cree que su equipo es capaz de conseguir al menos un punto en la capital asturiana.
"Vamos a contar con un equipo competitivo ante España, un equipo que luchará por (conseguir un buen) resultado", dijo esta semana.