Por William James y Conor Humphries
DUBLÍN (Reuters) - La desigual recuperación en Irlanda centraba el viernes la atención mientras los votantes acudían a las urnas en las elecciones nacionales, disputadas entre el cambio de un gobierno que ha supervisado años de austeridad y el miedo a que la inestabilidad política haga descarrilar la recuperación.
Enmarcadas en un debate sobre cómo repartir los beneficios de un crecimiento económico conseguido tras el rescate del país en 2010, las elecciones probablemente no den un ganador claro, según muestran las encuestas.
El resultado podría dejar a los grandes partidos enfrentados a la posibilidad de tener que unirse en una posible alianza sin precedentes o colocar al país en el limbo político.
El resultado mostrará hasta qué punto la promesa del primer ministro Enda Kenny de "mantener la recuperación en marcha" - que según sondeos de opinión no ha conseguido inspirar al electorado - consigue convencer a los votantes indecisos.
"Se nos exprimió hasta e último céntimo... así que me gustaría ver un cambio", dijo Geraldine Carragher, una profesora que votaba en el centro de Dublín y que cambió de la joven coalición laborista hace cinco años a la nueva de izquierdas formada en protesta por los recortes del Gobierno.
Otros eran más indulgentes, diciendo que apoyarían al Gobierno para evitar la inestabilidad de un Parlamento atascado y la creciente influencia de la izquierda.
"Dado el desastre que era la economía, lo han hecho bien", dijo Neil, un profesional de la construcción de 49 años, después de votar también en Dublín por lo que él denominó partidos tradicionales.
Las encuestas a pie de urna que se publicarán a las 0700 GMT del sábado darán las primeras indicaciones de si el partido de Kenny y el Laborismo han conseguido suficientes votos para mantener el poder.
Los bonos soberanos irlandeses subían ligeramente el viernes ante las preocupaciones de un cambio de Gobierno, aunque se mantenían cerca de las marcas más bajas.
Si no había un cambio de intención de voto de última hora, una manera de desbloquear podría ser una alianza contra los partidos tradicionales entre Fine Gael y sus rivales de centro derecha Fianna Fail. Pero estos partidos son herederos de los bandos opuestos de la guerra civil de hace casi un siglo y no parece que tengan ganas de unirse ahora.
El recuento de votos comenzará el sábado, con el primero de los 157 escaños asignado al principio de la tarde y los ganadores finales probablemente no se decidirán hasta principios de la semana que viene.