Por Adrian Croft
BRUSELAS (Reuters) - La Comisión Europea dijo el lunes que mantenía su posición de que Escocia tendría que abandonar la Unión Europea y volver a solicitar su pertenencia al bloque si los escoceses abandonan Reino Unido en un referéndum que se celebra este mes.
A diez días de la votación, una encuesta publicada el domingo mostró por primera vez este año que los seguidores de la independencia llevan ventaja sobre quienes quieren permanecer con una unión con Inglaterra desde hace 307 años.
La portavoz de la Comisión Europea Pia Ahrenkilde-Hansen rechazó hacer más comentarios sobre el referéndum escocés en la rueda de prensa diaria de la Comisión el lunes, diciendo que "les toca a los ciudadanos de Escocia y británicos decidir sobre el futuro de Escocia", dijo.
Añadió que la posición del Ejecutivo de la UE sobre una Escocia independiente no había cambiado.
Rechazó explicar cuál era, pero en respuesta a una solicitud de Reuters, la Comisión envió una carta del presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, a un miembro de la cámara alta del Parlamento británico en 2012. En la carta,Barroso establece la posición europea sobre si una Escocia independiente seguiría siendo parte de la UE de 28 naciones.
"Si parte del territorio de un estado miembro dejara de ser parte del Estado por ser un Estado independiente, los tratados de la UE no se aplicarían a ese territorio", dijo Barroso, lo que implica que una Escocia independiente no formaría parte de la UE.
Sin embargo, puntualizó que cualquier estado europeo que cumpliera los requisitos puede solicitar unirse a la UE.
Barroso entró en el debate sobre Escocia cuando dijo en una entrevista con la BBC en febrero que los estados que salen de países actuales de la UE tendrían dificultades para entrar en la UE.
Es necesario que todos los estados de la UE respalden al nuevo país que solicita la adhesión, dijo.
La secesión es un asunto delicado en varios países europeos, entre ellos España, que está preocupada de que la votación escocesa pueda alentar a los independentistas en Cataluña.
El primer ministro escocés, Alex Salmond, que lidera la campaña por la independencia, dijo en abril que si los escoceses optaban por salir de Reino Unido, él esperaba que fuera posible negociar la adhesión a la UE antes de la declaración formal de independencia en marzo de 2016.
Mientras, el Gobierno británico dijo el lunes que no está haciendo planes de contingencia ante la posibilidad de que los escoceses voten por la independencia el 18 de septiembre, según un portavoz del primer ministro británico, David Cameron.
Un sondeo de YouGov para el Sunday Times mostró que los defensores de la independencia habían cobrado ventaja en los sondeos de opinión por primera vez desde que se inició la campaña del referéndum.
Cuando se le preguntó si la posición del Gobierno sobre la realización de planes de contingencia había cambiado tras ese sondeo, el portavoz de Cameron dijo a los periodistas: "No. No ha habido cambios. El Gobierno están plenamente centrado en defender que Reino Unido siga unido".