BERLÍN (Reuters) - Las negociaciones de los acreedores mundiales con Grecia han tomado cierto ritmo pero siguen lejos de la línea de meta, dijo el responsable europeo del Fondo Monetario Internacional (FMI) a un diario alemán.
Atenas ha estado empantanada en negociaciones con sus socios de la zona euro y el FMI por una serie de reformas económicas que sus acreedores le piden que aplique para desbloquear los fondos de rescate que quedan por entregarle.
"Hubo un poco más de impulso en las negociaciones entre las tres instituciones y el Gobierno de Grecia durante varios días", dijo Poul Thomsen según fue citado por el diario financiero Handelsblatt, en referencia a la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el FMI.
"Este es un buen desarrollo y nos da motivo para tener esperanza", dijo Thomsen, director del Departamento Europeo del FMI y jefe del programa de la entidad para Grecia.
No obstante, el funcionario agregó que seguían "lejos de la meta" y que se necesitaba mucho más impulso en las negociaciones para lograr un acuerdo a tiempo.
Fuera de los mercados de bonos y casi sin dinero para cumplir con sus deudas y pagar a empleados públicos y pensionistas, Grecia recibiría más asistencia del FMI y los gobiernos de la zona euro sólo si hay un acuerdo en torno a reformas que vuelvan sus finanzas más sostenibles y su economía más competitiva.
Thomsen dijo que las negociaciones con el Gobierno de Atenas podrían durarían hasta finales de junio: "La carga para Grecia de los pagos (de deuda) que están llegando a plazo es muy grande. Necesitamos alcanzar un acuerdo de antemano para que puedan emitirse más préstamos de asistencia".
El viceprimer ministro de Grecia, Yannis Dragasakis, dijo el domingo al diario To Vima que Atenas apunta a lograr un acuerdo con sus acreedores respecto del paquete de reformas pero que no descartaba la realización de un referéndum o elecciones anticipadas si las negociaciones se estancaban.
Thomsen advirtió de que no se deben subestimar los riesgos asociados con la posibilidad de que Grecia abandone la zona euro: "Nadie debería pensar que la salida de Grecia no acarrearía problemas".
El funcionario del FMI añadió que era importante minimizar peligros a más largo plazo como "el riesgo de que la zona euro sea vista como un club al que uno se afilia y desafilia cuando quiere", dado que eso podría generar dudas sobre si los estados seguirán o no siendo miembros en el futuro.
Thomsen dijo que el bloque de la moneda única necesitaba enviar "una señal política muy fuerte" de que estaba siendo más integrador para disipar esos riesgos, y agregó que requería una unión fiscal y política más fuerte a más largo plazo.