ESTRASBURGO (Reuters) - El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, detalló el miércoles un plan para hacer frente a la crisis migratoria de la UE en un discurso sobre el Estado de la Unión ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo.
A continuación, algunos elementos de lo que el presidente del Ejecutivo de la UE quiere que los países de la UE acepten. El lunes se celebra una reunión extraordinaria de ministros del Interior para discutir las nuevas propuestas.
REUBICACIÓN
Juncker propuso la reubicación de un total de 160.000 solicitantes de asilo de Grecia (66.400) Hungría (54.000) e Italia (39.600) a otros países de la UE en dos años. Los estados de acogida recibirían 6.000 euros por persona, mientras que Grecia, Hungría e Italia obtendrán 500 euros por cada inmigrante reubicado para cubrir los gastos de transporte. El coste total de la operación para el presupuesto de la UE está estimado en 780 millones de euros. Al margen de Reino Unido, Irlanda y Dinamarca, el resto de estados de la UE estarían obligados a participar en el programa y aceptar cuotas de solicitantes de asilo, con Alemania y Francia recibiendo los mayores números. Los países pueden obtener una exención de un año "por motivos justificados y objetivos", pero a cambio tendrán que ofrecer una compensación económica de hasta el 0,002 por ciento de su producto interior bruto. Además de estas medidas de emergencia, Juncker también propuso un mecanismo permanente de reubicación, modificando el llamado sistema de Dublín por el que las reclamaciones son gestionadas por el primer estado de la UE al que llegan los solicitantes de asilo. Los países que afronten una emergencia en el futuro podrán compartir los solicitantes de asilo con otros Estados de la UE. La Comisión establecerá cuándo surge una emergencia basándose en varios criterios, entre ellos el aumento del número de solicitantes de asilo y el cruce ilegal de fronteras durante un período de seis meses.
PUNTOS DE ACCESO
Los países de la UE que participen en el plan de reubicación tendrán que establecer centros de acogida, conocidos como puntos de acceso, para identificar y tomas las huellas digitales de los inmigrantes para asegurarse de que no piden asilo en otros países de la UE. Personal de la UE trabajará en estos puntos para agilizar los procedimientos. Italia y Grecia han aceptado crear puntos de acceso, mientras que Hungría se ha opuesto hasta ahora a la idea.
DEPORTACIÓN
Juncker propuso una lista de países seguros cuyos ciudadanos tienen más probabilidades de ser devueltos rápidamente a su país de origen si piden asilo en la UE. Albania, Bosnia-Herzegovina, Kosovo, la ex República Yugoslava de Macedonia, Montenegro, Serbia y Turquía están incluidos en la primera lista. Alrededor de 17 por ciento del número total de solicitudes presentadas en la UE proceden de ciudadanos de estos siete países. Además, Juncker propuso un plan de acción para acelerar la deportación de otros inmigrantes que no tienen derecho a solicitar asilo en la UE. El plan incluye acelerar los retornos voluntarios, la firma de acuerdos de readmisión con los países de África y Asia y el fortalecimiento del papel de la agencia de control de fronteras de la UE, Frontex, que debe contar con "equipos de intervención rápida" para deportar a los inmigrantes irregulares.
FUERZAS DE FRONTERA
Frontex también se verá reforzada para que se convierta en "un sistema totalmente operativo para vigilar fronteras y costas europeas", dijo Juncker al Parlamento Europeo. Dijo que la Comisión propondría "pasos ambiciosos" para un servicio de Guardia Costera y Fronteriza Europea antes de que acabe el año.
AYUDA EXTERNA
Para hacer frente a las raíces de la emigración, Juncker propuso crear un fondo de emergencia para África, que será financiado con 1.800 millones de euros del presupuesto de la UE y otras contribuciones nacionales espontáneas. El fondo pretende dar apoyo económico y mejorar las capacidades de gestión de la emigración de los países subsaharianos, los estados del norte y este de África. El objetivo es tener un acuerdo total sobre la creación del fondo en la cumbre UE-Unión Africana de Malta del 11 al 12 de noviembre. Juncker también quiere que la Unión Europea aumente sus esfuerzos diplomáticos para resolver la crisis de Siria y Libia.