Por Louis Charbonneau y Stephanie Nebehay
LAUSANA, Suiza (Reuters) - Irán y las potencias mundiales alcanzaron el jueves un marco de acuerdo para limitar el programa nuclear de la República Islámica por al menos una década, un paso hacia un pacto definitivo que podría poner fin a 12 años de provocaciones, amenazas y confrontación.
El acuerdo tentativo, alcanzado tras ocho días de unas maratonianas negociaciones en Suiza, allana el camino para limitar la actividad nuclear de Teherán a cambio de la moderación de las sanciones en su contra.
El marco de acuerdo está supeditado a que se alcance un pacto definitivo para el 30 de junio, y todas las sanciones contra Irán permanecerán en vigor hasta que eso se logre.
En Teherán, la capital iraní, se produjeron celebraciones. Vídeos y fotografías publicadas en las redes sociales mostraron automóviles haciendo sonar sus bocinas en la ciudad mientras sus pasajeros aplaudían. En un vídeo publicado en Facebook (NASDAQ:FB), se puede escuchar a un grupo de mujeres aplaudiendo y gritando "gracias, Rohani", elogiando al presidente Hasan Rohani.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que el marco es "un acuerdo histórico con Irán" y lo comparó con los pactos de control de armas logrados por sus predecesores con la Unión Soviética que "hicieron más seguro a nuestro mundo" durante la Guerra Fría. También advirtió de que "el éxito no está garantizado".
Muchos detalles aún deben ser resueltos. Diplomáticos cercanos a las negociaciones dijeron que el acuerdo es frágil. No descartaron que los avances logrados puedan colapsar antes del 30 de junio. Expertos creen que será mucho más difícil alcanzar un pacto final que el marco de éste.
Bajo el marco de acuerdo, Irán detendría más de las dos terceras partes de sus centrífugas que producen uranio, material que puede ser usado para fabricar una bomba, desmantelaría un reactor que puede producir plutonio y aceptará verificaciones internacionales en su territorio.
Las negociaciones entre Irán y las seis potencias -Reino Unido, China, Francia, Alemania, Rusia y Estados Unidos- se extendieron más allá del plazo establecido el 31 de marzo sin certezas de que tendrán éxito.
CAUTELA IRANÍ
El marco de acuerdo, al que Israel se ha opuesto con ferocidad, incluye límites al enriquecimiento de uranio de Irán por 10 años.
Irán acordó reducir significativamente sus centrifugadoras operativas a 6.104 desde 19.000 y solamente operará 5.050 bajo el acuerdo futuro con las potencias, de acuerdo con un documento estadounidense. Irán sólo utilizará centrifugadoras de primera generación durante ese tiempo, dice el texto.
Uno de los temas más delicados durante las negociaciones, los trabajos de investigación y desarrollo de Irán, también serán limitados.
"Irán ha accedido a no realizar investigación y desarrollo asociados al enriquecimiento de uranio en Fordow durante 15 años", dice el documento de Estados Unidos.
El texto también destaca que Teherán retirará 1.000 centrifugdoras más avanzadas de segunda generación actualmente instaladas en Natanz y las almacenará bajo la supervisión del Organismo Internacional de Energía Atómica por 10 años.
El uranio altamente enriquecido puede ser utilizado para fabricar un arma, lo que las potencias buscan evitar, mientras que con un enriquecimiento bajo es utilizado en plantas de electricidad. Irán ha insistido en que sólo desea el uranio para un programa de energía nuclear pacífico y niega que desee construir una bomba atómica.
Bajo el marco, el tiempo que Irán necesitaría para conseguir suficiente material fisible para un arma se extendería a al menos un año, por una duración de unos 10 años. Actualmente se estima que Teherán esta a dos o tres meses de lograrlo, dice el documento de Estados Unidos.
Irán recibirá un alivio gradual de las sanciones de Estados Unidos y la UE si demuestra que cumple con el acuerdo. Algunas sanciones del Consejo de Seguridad serían levantadas gradualmente, aunque otras permanecerán vigentes, específicamente las relacionadas a la no proliferación nuclear.
"Todavía estamos lejos de alcanzar lo que queremos", dijo el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zarif.
El no cumplir con los términos del acuerdo provocará que las sanciones de Estados Unidos y la UE vuelvan a entrar en vigor inmediatamente, dice el documento estadounidense. Es menos específico sobre las sanciones de la ONU, uno de los principales puntos de discusión en las negociaciones, apuntando sólo que podrían imponerse nuevamente en caso de que Teherán no cumpla el pacto.
Zarif se mostró molesto por la decisión de Estados Unidos de divulgar su propio documento sobre el acuerdo, afirmando en la red social Twitter: "Las soluciones son buenas para todos así como están. No hay necesidad de confundir usando 'documentos' tan pronto".
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, dijo a periodistas que se debe trabajar en varios detalles técnicos, entre ellos el posible levantamiento del embargo de armas de la ONU y la modernización del reactor de aguas pesadas de Arak y la infraestructura subterránea de Fordow.
Pero Israel dijo que no celebrará el marco de acuerdo, afirmando que es ajeno a la realidad, y prometió seguir presionando para evitar un "mal" acuerdo final.
Las conversaciones representan la mejor oportunidad de un acercamiento entre Teherán y Washington desde la revolución islámica en 1979, pero se enfrentan al escepticismo de los conservadores en ambos países. Otros aliados de Estados Unidos en Oriente Próximo son escépticos, como por ejemplo Arabia Saudí.