MADRID (Reuters) - Los inmigrantes en situación irregular en España volverán a tener derecho a la atención primaria en la sanidad pública española, según anunció el martes el Gobierno, una decisión que fue criticada inmediatamente por asociaciones de ayuda a inmigrantes y sindicatos por insuficiente y electoralista.
La medida se ha tomado por cuestiones de salud pública y porque "es más práctico", dijo el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, después de que su ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, adelantara la información a través de una entrevista a la agencia Efe.
"Parece más sensato y más razonable que (la atención primaria) se haga en los ambulatorios para entre otras cosas que no se colapsen las urgencias", dijo Rajoy durante una rueda de prensa conjunta con el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en Moncloa.
El presidente añadió, sin embargo, que los inmigrantes no recuperarían la tarjeta que les fue retirada, según datos oficiales, a unas 800.000 personas con la aprobación de la reforma sanitaria en 2012.
"No tienen derecho a la tarjeta sanitaria igual que no lo tienen en ningún otro país de la UE", apuntó Rajoy.
El Gobierno del Partido Popular aprobó esta reforma como parte de su campaña de reducción del déficit público, y desde el primer momento fue rechazada por varios colectivos de médicos y responsables sanitarios, además de la oposición en el Congreso, aunque sus propuestas de enmendarla fueron rechazadas por la mayoría absoluta del PP.
Los detractores de la medida consideraron la reforma incompatible con el servicio universal de salud español y señalaron que podría terminar costando más al Estado si los inmigrantes iban a las salas de urgencias en lugar de acudir a consultas médicas habituales.
"INSUFICIENTE Y ELECTORALISTA"
Tras el anuncio del martes, algunas asociaciones criticaron la medida por considerarla insuficiente y electoralista ante un año plagado de comicios.
"La medida se adopta tan sólo como una forma de descongestionar las urgencias y no supondrá que a las más de 800.000 personas a quienes se les retiró la tarjeta sanitaria vayan a recuperarla", dijo en un comunicado la Red Acoge de atención a inmigrantes.
La asociación dijo que la rectificación de la reforma implicará que el acceso a la sanidad siga siendo limitado al no suministrar una tarjeta sanitaria.
"Las personas afectadas continuarán sin la posibilidad de tener asignadas un médico de referencia o ser derivadas a un o una especialista, ni tendrán historial médico. Además, tendrán que seguir haciendo frente al pago del cien por cien de los medicamentos", dijo Red Acoge.