Por Marton Dunai y Joanna Plucinska
BUDAPEST/VARSOVIA, 2 abr (Reuters) - El primer ministro húngaro, el nacionalista de derechas Viktor Orbán, y su aliado polaco, Mateusz Morawiecki, se reunieron el jueves con Matteo Salvini, líder del partido de ultraderecha italiano la Liga, para tratar de sentar las bases de una nueva agrupación parlamentaria europea.
Los políticos nacionalistas llevan mucho tiempo intentando unificar sus fuerzas en Europa, sin haberlo conseguido hasta ahora en parte debido a intereses nacionales enfrentados y en parte por las grandes diferencias de opinión sobre las relaciones exteriores, como por ejemplo en lo que respecta a los vínculos con Rusia.
Orbán cultiva una relación muy próxima con el presidente ruso Vladimir Putin. Hungría se ha pronunciado en contra de las sanciones de la UE a Rusia, utiliza petróleo, gas y energía nuclear rusas, y se convirtió en el primer país de la UE en utilizar una vacuna rusa contra la COVID-19.
Salvini también está a favor de Rusia, al igual que otros partidos de la posible alianza. Pero eso podría no sentar bien a los polacos y causar malestar entre otros posibles aliados, dicen fuentes diplomáticas.
"Me sorprende mucho esta especie de 'cumbre', habida cuenta de que Salvini no está en el Gobierno italiano", dijo a Reuters una fuente diplomática familiarizada con el asunto.
"Hay demasiados asuntos aún pendientes, como el de Rusia, y no veo a los tres políticos saliendo esta noche (del jueves al viernes) y anunciando un grupo parlamentario común en la UE".
Aun así, Orbán percibe la oportunidad política del momento después de que su partido Fidesz abandonara el mes pasado el conservador Partido Popular Europeo (PPE), afirmando que ve potencial en un nuevo grupo parlamentario ultraconservador.
"Cuando la relación entre Fidesz y el PPE terminó, la situación se aclaró en Europa", dijo Orbán a la televisión estatal a última hora del miércoles.
Muchos europeos rechazan la inmigración y el multiculturalismo, prefieren un modelo familiar tradicional y quieren proteger su identidad nacional, considerando que la autoridad nacional es superior a las directivas europeas, afirmó Orbán.
"Estos votantes tienen una representación fragmentada en Europa", dijo. "Intentaremos remediarlo".
Un portavoz del PiS (el conservador Ley y Justicia gobernante en Polonia) no respondió a la solicitud de comentarios de Reuters. Salvini dijo el martes que uniría fuerzas "si tuviera ese deseo".
Orbán pretende ser un catalizador de los nacionalismos europeos, algo que los números avalan, según los analistas.
El partido PiS de Morawiecki es la principal fuerza del grupo parlamentario de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR, por sus siglas en inglés), mientras que la Liga de Salvini es el miembro más fuerte del grupo Identidad y Democracia (ID) que también incluye a la Agrupación Nacional de la ultrederechista francesa Marine Le Pen.
Estos partidos suman 135 de los 705 escaños del Parlamento Europeo, y Fidesz añade otros 12.
Esto podría convertirlos en una fuerza a tener en cuenta en Europa si consiguen resolver sus diferencias, incluidas las que existen dentro de la Liga en Italia, dijo Zoltan Novak, del Centro para el Análisis Político Justo.
"La Liga está dividida. Algunos quieren unirse al PPE", dijo. "Pero Salvini apoya firmemente a Orbán, y (la Liga) podría ayudar a crear un nuevo polo en el Parlamento Europeo".
(Información de las redacciones de Reuters; escrito por Marton Dunai @mdunai; editado por Hugh Lawson (T:2651); traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)