Por Richard Martin
BARCELONA (Reuters) - Las cifras goleadoras de Lionel Messi son "de otra galaxia", dijo el viernes el entrenador del Barcelona, Luis Enrique, en la víspera del Clásico contra el Real Madrid, en el que el astro argentino podría marcar el tanto número 500 de su carrera.
El penalti marcado por Messi ante Bolivia el martes en las eliminatorias mundialistas significó su gol número 499 entre partidos con su club y la selección, y no existe una ocasión mejor para que el "10" azulgrana llegue a los 500 que el choque del sábado ante el Real Madrid en el Camp Nou.
"Esa cifra (499) es de otra galaxia. La mayoría de jugadores, entre ellos yo, no llegaría a ese número de goles ni siquiera sumando los de los entrenamientos", dijo Luis Enrique. "Le veo la cara y está como loco por conseguir la victoria, como sus compañeros. Nos acercaría a la Liga y sería una alegría para la afición", agregó.
A falta de ocho partidos para el final de la Liga, el Barça lleva 10 puntos de ventaja al Real Madrid, tercero en la tabla, y nueve al segundo, el Atlético de Madrid, por lo que parece improbable que el Clásico afecte a la carrera por el título.
Sin embargo, Luis Enrique descartó que esta situación quite importancia al cotejo para su equipo, que podría convertirse en el primero en España que gana dos tripletes consecutivos.
"No lo creo, en absoluto", dijo. "Nosotros nos estamos jugando seguir siendo líderes y dar un paso de gigante en el campeonato liguero. Da igual la diferencia de puntos, son dos de los mejores equipos que se pueden ver en el mundo, con las mejores plantillas de Europa y del mundo (...) Es un partido muy complicado para los dos equipos".
El encuentro será el primero que juega el Barcelona desde la muerte de su ídolo Johan Cruyff. Antes del partido se guardará un minuto de silencio en memoria del visionario jugador y entrenador holandés, y los jugadores azulgranas llevarán el mensaje "Gracias Johan" en sus camisetas, aunque Luis Enrique dijo que no necesitan motivación extra.
"El Barça tiene un espíritu competitivo a prueba de bombas, fuera de toda duda. Necesitamos estar en el partido con el grado óptimo de motivación (...) Ante el Real Madrid, por ser el eterno rival, es relativamente fácil conseguir eso", agregó. "Lo que más desearía Johan Cruyff, más que cualquier homenaje, es que ganemos el partido a través de un buen fútbol y de un buen espectáculo".